MAS LISTOS QUE DIOS?

2 Samuel 7:17 Reina-Valera 1960 (RVR1960) Conforme a todas estas palabras, y conforme a toda esta visión, así habló Natán a David. 

Cada vez que pienso en David el Rey y pienso en el término "un corazón conforme al de Dios", se me eriza la piel, ya que eso significa que hubo un hombre que entendía a Dios y por tal Dios lo puso a reinar, a pesar de que Dios no estaba muy de acuerdo en que hubiera Reyes sobre su pueblo, siendo que Él había diseñado una Teocracia y no una Monarquía. Por tanto el tal David debía de ser alguien muy especial, alguien que tenía un gran celo por las cosas de Dios y una manera muy particular de vivir para Dios y trasmitirlo a los hombres, ya que antes que otra cosa debe de haber reflejado su amor, si no, no me imagino eso de "un corazón conforme al de Dios". 
En otras palabras, David debió ser un gran maestro y seguramente llevó a muchos a esa intimidad con Dios que muchos anhelamos, y con el respaldo de autoridad que Dios le dio, muchos lo seguían, aun antes de ser Rey. El problema en muchas ocasiones con personas como David, es que se acostumbran a que saben mas que los demás y que se acostumbran a ser respetados por lo que saben y por el tipo de relación que tienen con Dios, a las personas nos llaman la atención los "David" que nos rodean y nos gusta de alguna manera considerarlos "especiales" de modo que no solemos fijarnos en los detalles finos de su vida. David sabía esto y como muchas personas que se encuentran en su posición hoy en día, empiezan a ser "flexibles" consigo mismos y con su relación con Dios y empiezan a "tolerar" ciertas actitudes y cierto nivel de pecado en su vida, al fin y al cabo siguen siendo "mejores" que los demás y nadie lo va a notar. 
Justo así le sucedió a David, empezó a vivir por la medida de las personas y no por la medida de Dios y empezó a permitirse ciertas cosas que en definitiva no estaban de acuerdo a lo que Dios le había mandado, pero las personas le seguían amando y admirando y no solo por ser su Rey, de modo que empezó a ser condescendiente consigo mismo, al grado de alejarse totalmente de aquel que lo puso en el trono. Es interesante pensar que después de haberse metido con la mujer de Urías y haberlo mandado matar, David pasó algo así como 18 meses sin ir a la presencia de Dios y por alguna razón nadie en el Reino lo había notado o bien nadie lo había cuestionado, ese es el riesgo cuando ponemos la mirada en las personas, dejamos de ver lo correcto y empezamos a ver lo que queremos ver con tal de conseguir su favor. No sé exactamente que era lo que pasaba por la mente de David, ni cuanto tiempo pretendía esconderse de Dios, de acuerdo a la ley y a lo que Dios estipulaba, su pecado le significaba la muerte y obvio, David no era tonto, tenía 18 meses cuidándose de la muerte. 
Lo que David olvidaba es que Dios le había puesto como cabeza sobre su pueblo y le necesitaba en su presencia y además de todo esto, Dios conocía el corazón de David, y sabía que las mujeres eran su debilidad, por tanto Dios decidió poner fin a esta situación y envió a Natán un Profeta externo al Reino a platicar con Él. Cuando entiendo esto, me quedo maravillado del amor de Dios, aunque Dios no nos necesita en lo particular, ha decidido usarnos, tal como lo hizo con David, que a pesar de encontrarse en pecado y a pesar de pensar que podía esconderse de Dios, Dios lo busca con amor, lo confronta y lo lleva a justicia de nuevo para que todo su Reino pueda vivir bajo la bendición de Dios, tal como había planeado desde un principio. Muchas personas no se acerca a Dios, porque primero tienen que corregir sus errores y alinear su vida (hay que pensar que no tienen a qué alinearla si no leen la Biblia), siendo que Dios nos muestra que es un Dios amoroso y misericordioso y que más allá de pensar en juzgar nuestro pecado, necesita que cumplamos con nuestro papel y nuestro propósito, para que Él pueda lucir como el Dios que es. 
Si aquel hombre que tenía el corazón y la confianza de Dios no pudo engañarle ni ser mas inteligente que Él, creo que usted y yo no tenemos mucha oportunidad, por tanto es mejor alinearnos a la palabra y perseverar en el propósito revelado que tengamos de Dios, no lo cree?

PROTECCION DIVINA

Una vez Jacob y toda su familia se encuentran con José en Egipto, José los va a presentar ante el Faraón, pero les advierte que, cuando les pregunte sus oficios, no digan que son pastores de ovejas, sino ganaderos, porque para los egipcios era abominación todo pastor de ovejas.  Cuando Faraón les preguntó, sus hermanos contestaron que eran pastores de ovejas, y Faraón da la orden que habiten en la tierra de Gosén. 
A Faraón no le importó que dijeran que eran pastores de ovejas, pero a Dios sí le importó.  En Éxodo, dice que Dios hace la diferencia entre egipcios e israelitas, pero Dios no puede diferenciarte de los demás, si tú no has sido capaz, delante de Egipto,  de permanecer real a la identidad de quien tú eres.  Cuando cedemos a la presión del mundo y, por una necesidad, nos avergonzamos de lo que somos, entonces no somos merecedores de la bendición de Dios.
Cuando los hermanos de José dijeron que eran pastores de ovejas, los egipcios no querían conectarse con ellos, pero eso precisamente era lo que Dios había pretendido en ese momento, para mantener pura la nación y la promesa de Dios, para que el linaje de Dios no se contaminara.
Cuando tú eres capaz de pararte firme en quién tú eres, separas de tu vida a aquellas personas que nunca debieron estar, y esto te ayuda a alcanzar lo que Dios te ha prometido, estableciendo un marco de protección alrededor de ti y los tuyos. 
Muchos quieren entrar a Gosén.  Pero, para entrar en Gosén, hay que mirar a Faraón a los ojos y decirle: Yo soy quien yo soy.  Si tú no eres capaz de cruzar una línea entre el mundo y lo que te conecta con Dios, entonces Dios no puede hacer la diferencia en tu vida ante ellos.  Muchos, ante la necesidad, comienzan a ceder y simplemente se olvidan de que Dios no puede hacer la diferencia en sus vidas, si no lo hacen ellos primero.
Quizás estás en Egipto, pero allí tú marcas la diferencia.  Trabajas entre ellos, caminas entre ellos, pero no olvides que, en medio de Egipto, está Gosén. 
Mantente firme, mantén tu fe en medio de Egipto.  Algunos no querrán tener relación contigo; otros, como Faraón, te dirán: Tranquilo, vive aquí conmigo. Pero sé capaz de mantenerte íntegro en quien tú eres, y Dios pondrá en ti una cobertura que, en los momentos más difíciles, te dará protección. 
Párate firme ante el mundo, y declara tu identidad. No cedas ante las necesidades.  Tú no eres cualquier cosa.  Tú eres un hijo de Dios, lavado con la sangre de Cristo.  Le sirves a un Dios Todopoderoso.  Marca la diferencia, porque es Dios quien se encargará de trazar la línea entre los que le sirven y los que no le sirven, y protegerá la promesa que él ha declarado sobre tu vida.