EL JUEGO DEL PODER: NXIVM Y KEITH RANIERE


 

LA MONTAÑA

 ¿Alguna vez has notado cómo en las Escrituras los hombres siempre suben a las montañas para comunicarse con el Señor?


 Sin embargo, en las Escrituras casi nunca

 oye hablar de mujeres que van a las montañas

 y sabemos por qué, ¿verdad?


 Porque las mujeres estaban demasiado ocupadas

 en mantener la vida en marcha;

 no podían abandonar a los bebés

 los alimentos,

 sus casas,

 las fogatas

 los jardines,

 ¡Y mil responsabilidades como para subir a las montañas!


 Estaba hablando con una amiga el otro día

 diciendo que como mujer moderna

 siento que nunca soy lo suficientemente "libre"

 de mis responsabilidades nunca en un lugar lo suficientemente tranquilo o en lugar lo suficientemente santa para tener el tipo de comunión Quiero con Dios.


 Su respuesta me conmovió

 “Por eso Dios viene a las mujeres.

 Los hombres tienen que escalar la montaña para encontrarse con Dios, pero Dios viene a las mujeres donde quiera que ellas estén ".


 He estado reflexionando sobre sus palabras durante semanas y he buscado en las escrituras

 para ver que lo que ella dijo es verdad.

 Dios de hecho viene a las mujeres

 Dónde están,

 cuando hacen lo ordinario,

 trabajo diario.


 Los encuentra en los pozos

 donde sacan agua para sus familias, en sus casas en sus cocinas, en sus jardines


 Él viene a ellas

 mientras se sientan al lado de camas de enfermos,

 mientras dan a luz, cuidan a los ancianos, y realizan los duelos necesarios y los ritos funerarios.


Incluso en la tumba vacía,

María fue la primera en presenciar la resurrección de Cristo.

 Ella estaba allí porque estaba haciendo la tarea femenina de preparar adecuadamente el cuerpo de Cristo para el entierro.


 En estas tareas aparentemente 

 mundanas y ordinarias estas mujeres de las Escrituras se encontraron cara a cara con la divinidad.


Entonces, si, como yo, alguna vez comienzas a lamentar el hecho de que no tienes tanto tiempo para pasar en las montañas con Dios como quisieras.  Recuerda, Dios viene a las mujeres.  Él sabe dónde estamos y las cargas que llevamos.  Él nos ve, y si abrimos nuestros ojos y nuestros corazones, lo veremos, incluso en los lugares más comunes y en las cosas más comunes.


Créditos a quien corresponda.

UNA MUJER CABALGA LA BESTIA

 

¿Está enterado de todo lo que sucederá en los últimos días? ¿Quién es esta mujer? La tradición dice que está relacionada con la iglesia de Roma.

En la actualidad, prácticamente toda la atención está enfocada en el Anticristo venidero, pero él es sólo la mitad de la historia. Muchos se asombran al descubrir que en Apocalipsis 17 también hay otro personaje misterioso en el centro mismo de la profecía: una mujer que cabalga la bestia.

¿Quién es esta mujer?

La tradición nos dice que está relacionada con la iglesia de Roma. Pero, ¿acaso dicho punto de vista no está pasado de moda? Después de todo, el Vaticano de hoy está ansioso de tomarse de las manos de los Protestantes de todo el mundo. Lo que se oye es que “la Iglesia Católica ha cambiado”. Pero, ¿ha cambiado realmente? En Una mujer cabalga la bestia,

Dave Hunt, experto en profecía, escudriña las verdades bíblicas y los sucesos mundiales para presentar un cuadro bien definido de la mujer y el poderoso lugar que ocupará en el futuro impero del Anticristo. Catorce indicios extraordinarios en Apocalipsis 17 y 18 demuestran que la identidad de la mujer está fuera de toda duda. Un provocativo relato de lo que la Biblia nos dice que ha de venir.

EL CULTO A LA MUERTE


En el jardín del Edén la obra" maestra del diablo fue lograr la muerte espiritual de Adán y Eva...

pero del fruto del árbol que está en medio del huerto dijo Dios: No comeréis de él, ni le tocaréis, para que no muráis. Entonces la serpiente dijo a la mujer: No moriréis; sino que sabe Dios que el día que comáis de él, serán abiertos vuestros ojos, y seréis como Dios, sabiendo el bien y el mal.

Génesis 3:3-5

El aguijón de la muerte es el pecado...y sin pecado la muerte no tiene  aguijón...es como un alacrán sin cola...o un perro sin dientes...Adán andaba debajo del agua poniendo nombre a los peces y no usaba traje de buzo no se ahogaba..saltaba de un árbol a otro mejor que Tarzán y no se quebraba ni un hueso... ya que el aguijón de la muerte es el pecado, y el poder del pecado, la ley.

1 Corintios 15:56

Sin duda los antediluvianos la adoraron....

En Babilonia que es la madre de las abominaciones de la tierra... también existía este culto...al angel de la muerte

Esta mal ir y arreglar las tumbas de nuestro seres queridos y limpiarlas??

NO

PERO TENEMOS TODO EL AÑO PARA HACER ESO Y NO PRESCISAMENTE TIENE QUE SER EN LOS DIAS QUE SE CELEBRARÁ  EL DIA DE LOS MUERTOS...

No he comido de ello en mi luto, ni he gastado de ello estando yo inmundo, ni de ello he ofrecido a los muertos; he obedecido a la voz de Jehová mi Dios, he hecho conforme a todo lo que me has mandado.

Deuteronomio 26:14

NUESTRO DIOS ES UN DIOS DE VIVOS Y NO DE MUERTOS ..TODO AQUEL QUE MURIO CREYENDO EN CRISTO COMO SU SEÑOR Y SALVADOR SOLO DUERME...EN EL ARREBATAMIENTO SERA DESPERTADO PARA VIDA ETERNA ...

Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero. Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor.

1 Tesalonicenses 4:16-17

LA MUERTE ES UN ENEMIGO DEL CREYENTE...

Porque preciso es que él reine hasta que haya puesto a todos sus enemigos debajo de sus pies. Y el postrer enemigo que será destruido es la muerte.

1 Corintios 15:25-26

LA MISMA MUERTE SERA CONDENADA EN EL LAGO DE FUEGO...

Y la muerte y el Hades fueron lanzados al lago de fuego. Esta es la muerte segunda.

Apocalipsis 20:14

LA MISMA MUERTE FUE DERROTADA EN LA RESURRECCIÓN DE NUESTRO SEŃOR JESUCRISTO...

a éste, entregado por el determinado consejo y anticipado conocimiento de Dios, prendisteis y matasteis por manos de inicuos, crucificándole; al cual Dios levantó, sueltos los dolores de la muerte, por cuanto era imposible que fuese retenido por ella.

Hechos 2:23-24

EN LA PRIMERA RESURRECCIÓN LA DE VIDA..LA MUERTE ES SORBIDA....

Y cuando esto corruptible se haya vestido de incorrupción, y esto mortal se haya vestido de inmortalidad, entonces se cumplirá la palabra que está escrita: Sorbida es la muerte en victoria.

1 Corintios 15:54

AUNQUE DESDE LA CONVERSION YA PARTICIPAMOS DE LA PRIMERA RESURRECCIÓN...

Y él os dio vida a vosotros, cuando estabais muertos en vuestros delitos y pecados,

Efesios 2:1....


EL PORNO, UN MAL PROFESOR

El pasado 22 de septiembre Save the Children publicó un informe llamado '(Des)información sexual: pornografía y adolescencia sobre el consumo de porno entre los más jóvenes y el impacto del mismo en sus relaciones. 

De 1.753 adolescentes de entre 13 y 17 años entrevistados:

7 de cada 10 consumen pornografía.

La  primera exposición es a los 12 años.

Más de la mitad de los que ven pornografía se inspiran en ella para sus propias experiencias.

Para el 30% el porno es su única fuente de información sobre sexualidad. 

Los chicos ven porno casi a diario, mientras las chicas una vez a la semana o al mes. 

27,1% de las chicas no sabe identificar prácticas de riesgo como la ausencia de preservativo.

Casi la mitad de la población adolescente afirma no utilizar siempre métodos de protección

El 13,7% no lo hace nunca o casi nunca.

El 13,8% han entrado en contacto, al menos una vez, con una persona desconocida con fines sexuales a través de internet. 

En su informe, la organización apunta que el peligro no es que vean pornografía, sino cómo afecta esto a su comportamiento a la hora de relacionarse sexualmente, y pide que se potencie la educación afectivo-sexual en la enseñanza reglada. 

Si bien es cierto que la educación sexual en las escuelas e institutos deja mucho que desear, cuesta un poco creer que un buen currículum pueda competir contra la avalancha de dopamina y excitación que el porno produce en los cerebros adolescentes, muchos de ellos ya adictos. Además, ¿en manos de quién estaría la realización de ese currículum? ¿Quién tiene la verdad sobre lo que es saludable o no en cuanto a sexo se refiere?

¿Tiene algo que decir la Iglesia a esta sociedad ante esta crisis? Es más, ¿está preparado el cuerpo de Cristo para ayudar a un 70% de consumidores de porno entre sus grupos de jóvenes y adolescentes? Debemos ser capaces de proponer algo más que un currículum escolar. Nuestros niños, adolescentes y jóvenes necesitan ver la sexualidad con los ojos de Dios, y  ser capaces de mantenerse firmes ante este asedio sin precedentes a su salud física, emocional y espiritual. 

A la vez, nuestra sociedad está pidiendo a gritos una Iglesia que, lejos de estar a la defensiva, entienda y disfrute del sexo más que nadie siguiendo el diseño del Creador, que marque el camino a seguir, y que esté libre de las mentiras envenenadas de la industria sexual. 

COMO MURIERON LOS APÓSTOLES




 1. Mateo  Sufrió el martirio en Etiopía, asesinado por una herida de espada.

 2. Marcos.  Murió en Alejandría, Egipto, después de ser arrastrado por caballos por las calles hasta que murió.

 3. Lucas.  Fue ahorcado en Grecia como resultado de su tremenda predicación a los perdidos.

 4. Juan.  Enfrentó el martirio cuando lo hirvieron en una enorme cuenca de aceite hirviendo durante una ola de persecución en Roma.  Sin embargo, fue milagrosamente liberado de la muerte.

 Juan fue sentenciado a las minas en la prisión de la isla de Patmos.  Escribió su profético Libro de Apocalipsis sobre Patmos.  El apóstol Juan fue luego liberado y regresó para servir como obispo de Edesa en la Turquía moderna.  Murió como un anciano, el único apóstol que murió en paz.

 5. Pedro.  Fue crucificado boca abajo sobre una cruz en forma de x.  Según la tradición de la iglesia, fue porque les dijo a sus verdugos que se sentía indigno de morir de la misma manera que Jesucristo había muerto.

 6. Santiago.  El líder de la iglesia en Jerusalén fue arrojado más de cien pies hacia abajo desde el pináculo sureste del Templo cuando se negó a negar su fe en Cristo.  Cuando descubrieron que sobrevivió a la caída, sus enemigos mataron a golpes a Santiago con un garrote más completo.

 Este fue el mismo pináculo donde Satanás había llevado a Jesús durante la Tentación.

 7. Santiago el Hijo de Zebedeo era un pescador de oficio cuando Jesús lo llamó a toda una vida de ministerio.

 Como un líder fuerte de la iglesia, Santiago fue decapitado en Jerusalén.  El oficial romano que vigilaba a Santiago observó asombrado mientras él defendía su fe en su juicio.

 Más tarde, el oficial caminó junto a Santiago hasta el lugar de ejecución.  Superado por convicción, declaró su nueva fe al juez y se arrodilló junto a Santiago para aceptar la decapitación como cristiano.

 8. Bartolomeo.  También conocido como Natanael.  Fue misionero en Asia.  Fue testigo de nuestro Señor en la actualidad Turquía.  Bartolomeo fue martirizado por su predicación en Armenia, donde fue azotado hasta la muerte por un látigo.

 9. Andrés.  Fue crucificado en una cruz en forma de x en Patras, Grecia.  Después de ser azotados severamente por siete soldados, ataron su cuerpo a la cruz con cuerdas para prolongar su agonía.

 Sus seguidores informaron que, cuando fue conducido hacia la cruz, Andrés lo saludó con estas palabras: "Hace mucho que deseaba y esperaba esta hora feliz. La cruz ha sido consagrada por el cuerpo de Cristo".  Él continuó predicando a sus torturadores durante dos días hasta que expiró.

 10. Tomas.  Fue apuñalado con una lanza en la India durante uno de sus viajes misioneros para establecer la iglesia en el subcontinente.

 11. Judas.  Fue asesinado con flechas cuando se negó a negar su fe en Cristo.

 12. Matías.  El apóstol eligió reemplazar al traidor Judas Iscariote.  Fue apedreado y luego decapitado.

 13. Pablo.  Fue torturado y luego decapitado por el malvado emperador Nerón en Roma en el año 67 d. C. Pablo sufrió un largo encarcelamiento, lo que le permitió escribir sus numerosas epístolas en las iglesias que había formado en todo el Imperio Romano.  Estas cartas, que enseñaron muchas de las doctrinas fundamentales del cristianismo, forman una gran parte del Nuevo Testamento.

 Quizás este es un recordatorio para nosotros de que nuestros sufrimientos aquí son realmente menores en comparación con la intensa persecución y la crueldad fría que enfrentaron los apóstoles y discípulos durante sus tiempos por el bien de la fe.

" Y seréis aborrecidos de todos los hombres por amor de mi nombre: Mas el que persevere hasta el fin será salvo. "

ISAÍAS Y LAS DOCTRINAS DE LA GRACIA

 




LAODICEA

 La ciudad

Laodicea esta situada a unos sesenta y nueve kilómetros al sureste de Filadelfia, diecisiete al oeste de Colosas y casi diez de Hierápolis (Col. 4:13) en el valle de Licos. Era la puerta de entrada a Éfeso, a unos ciento sesenta kilómetros al este, la cual era, a su vez, la puerta de entrada a Siria. Hasta mediados del siglo tercero antes de Cristo, se la conocía como Diospolis (la ciudad de Zeus) y Roas. Pero alrededor del 250 a.C. el gobernante sirio Antíoco II extendió su influencia hacia el oeste, conquistó la ciudad, y le puso por nombre Laodicea en honor a su esposa Laodicea. Los romanos penetraron en la zona en el 133 a.C. y convirtieron a la ciudad en un centro judicial y administrativo. Construyeron un sistema de carreteras de este a oeste y de norte a sur. 

En la encrucijada estaba la ciudad de Laodicea, que aumentó en tamaño, se convirtió en centro comercial principal y consiguió riqueza e influencia. Su industria de la lana floreció gracias a la producción y exportación de lana negra, de la fabricación de ropas corrientes y costosas y de la invención de un colirio eficaz para los ojos. Tenía una floreciente escuela de medicina que se especializaba en oídos y ojos y había desarrollado un ungüento para tratar la inflamación de ojos. Debido a este ungüento, la escuela adquirió fama mundial.

Un devastador terremoto causó grandes daños a Laodicea en el 17 d.C. y, al igual que a otras ciudades en la provincia de Asia, recibió ayuda económica del gobierno romano. En el 60 d.C. un segundo terremoto afectó a la ciudad, y el gobierno romano ofreció ayuda financiera para reconstruir la ciudad. Pero los padres de la ciudad enviaron al gobierno una respuesta negativa e informaron que disponían de abundantes recursos para la reconstrucción. De hecho, incluso contribuyeron para la reconstrucción de ciudades vecinas.

Antíoco el grande (conocido también como Antíoco III) trajo a unas dos mil familias judías de Babilonia a Lidia y Frigia a mediados del siglo tercero a.C. La ciudad de Laodicea, fronteriza de estas dos regiones, acogió a muchas de estas familias y prosperó. Cuando en el 62 d.C. los judíos quisieron pagar su impuesto anual para el mantenimiento del templo en Jerusalén, el procónsul Flaco confiscó el envío de oro. Parte de este envío provenía de Laodicea y ascendía a unos nueve kilos. «Se ha calculado que la cantidad proveniente de Laodicea significaría que la población adulta de judíos libertos en el distrito era de 7,500». La carta a la iglesia en Laodicea no indica nada en cuanto a una presencia judía, lo cual puede significar que esta iglesia, como la de Sardis, predicaba un evangelio que no significaba para nada una amenaza para los judíos. Y los cristianos de Laodicea tampoco tuvieron que enfrentarse a ninguna persecución de parte de los gentiles, ni tampoco hubo en la ciudad falsos profetas, incluyendo a nicolaítas, a Balaam o a Jezabel. El templo para rendir culto al César estaba en un lugar céntrico de la ciudad. La iglesia se conformaba a otras religiones, disfrutaba de riqueza material, vivía una vida fácil, y no insistía en los derechos de Cristo. En consecuencia, Jesús no pronuncia ninguna palabra de alabanza o ponderación de esta iglesia ni de iglesias similares que no llegan a proclamar su mensaje de salvación.

En esta breve síntesis debería mencionarse un último término. El suministro de agua para Laodicea llegaba desde Hierápolis, a una distancia de unos diez kilómetros, por medio de un acueducto. La fuente contenía aguas termales ricas en carbonato de calcio; cuando el agua llegaba a Laodica, su temperatura era tibia. Aunque estas fuentes termales tenían valor medicinal y eran como un balneario para los habitantes del lugar, Jesús compara las aguas templadas cerca de la ciudad con la tibia vida espiritual de los cristianos de Laodicea.

a. Descripción

3:14–16

14. «Y al ángel de la iglesia en Laodicea escribe: El Amén, el testigo fiel y verdadero, el origen de la creación de Dios, dice esto: 15. Conozco tus obras; no eres ni frío ni caliente. Ojalá fueras frío o caliente. 16. Así que, porque eres tibio y ni frío ni caliente, estoy a punto de vomitarte de mi boca.

Aparte de este texto, el nombre Laodicea sólo se encuentra una vez en todo el Nuevo Testamento (Col. 4:13). Su cercanía a Colosas sugiere que Epafras fuera probablemente el fundador de la iglesia en Laodicea (Col. 1:7; 4:12–13). Pablo envió una carta a esta iglesia, y pidió a los colosenses que procuraran que su carta se leyera en la iglesia de los laodicenses y que ellos a su vez leyeran la carta de los laodicenses (Col. 4:16). No disponemos de información acerca de si Pablo visitó alguna vez esta iglesia. Quizá después de que fue puesto en libertad tras su prisión en Roma, visitó Colosas (Flm. 22) y la vecina Laodicea.

a. «Y al ángel de la iglesia en Laodicea escribe: El Amén, el testigo fiel y verdadero, el origen de la creación de Dios, dice esto». De todas las siete cartas a las iglesias en el occidente de Asia Menor, ésta es la única en la que la descripción de Cristo no se basa en la aparición de Jesús a Juan en la isla de Patmos (1:12–16). Se basa en el saludo, que dice «y de Jesucristo, el testigo fiel, el primogénito de entre los muertos» (1:5a).

La descripción que hace Jesús de sí mismo como la palabra Amén proviene del texto hebreo del Antiguo Testamento. El «Amén» transmite la idea de lo que es verdadero, firmemente establecido y digno de confianza. Era una palabra muy conocida de los que rendían culto a Dios, quienes se unían en una doxología, proclamando su confirmación de lo que habían oído (p.ej., 1 Cr. 16:36; Sal. 106:48). Es un «Sí» enfático como respuesta afirmativa a una oración o una conclusión para una doxología (Ro. 1:25; 9:5; 11:36; 16:27; Gá. 6:18; Ap. 1:7; 5:14; 7:12; 19:4). Precedido del artículo definido, el Amén se ha personificado en el texto hebreo como «el Dios de Amén», traducido, «el Dios de la verdad» (Is. 65:16; compárese con 2 Co. 1:20). Jesús se atribuye este título y lo interpreta en la siguiente cláusula como «el testigo fiel y verdadero». Los términos fiel y verdadero son ambos traducciones de la misma expresión hebrea Amen.

Esta frase aclaradora el testigo fiel y verdadero es un eco del saludo trinitario (1:4b–5); sin el término testigo describe al jinete en un caballo blanco (19:11). Significa que todo lo que Jesús dice es indudablemente verdadero, de modo que al final de Apocalipsis leemos la afirmación: «estas palabras son fieles y verdaderas» (21:5; 22:6). Por ser testigo fiel, Antipas sufrió martirio en Pérgamo (2:13). Al cumplir las profecías del Antiguo Testamento (Is. 43:10–13 y 65:16–18), Cristo es el verdadero Israel, porque es el «Amen, el testigo fiel y verdadero».

Cuando Jesús se refiere a sí mismo como «el origen de la creación de Dios», vemos un nexo íntimo con la carta de Pablo a los colosenses, que los laodicenses leyeron en servicios de culto (Col. 4:16). El Señor se llama a sí mismo el «origen [griego arjē] de la creación de Dios». No deberíamos interpretar la palabra origen en forma pasiva, como si Jesús fuera creado o recreado, sino de manera activa, porque Jesús es quien genera y trae a la existencia la creación de Dios (Jn. 1:1; Col. 1:15–18; Heb. 1:2). ¿Cuál es, pues, el propósito de esta descripción? Mostrar que Jesucristo hizo todas las cosas y por ello las posee y controla. También, todas las cosas fueron hechas para servirle. El mensaje a los laodicenses es que su jactancia por sus riquezas materiales está fuera de lugar porque todas las cosas pertenecen a Jesús, quien es digno de alabanza y gloria.

b. «Conozco tus obras; no eres ni frío ni caliente. Ojalá fueras frío o caliente». El término obras también se encuentra en las otras cartas (2:2, 19; 3:1, 8). Aquí significa exactamente lo mismo que en la carta a la iglesia en Sardis (v. 1): obras incompletas que ni vale la pena mencionar. Jesús conocía las obras tanto de Sardis como de Laodicea y para estas dos iglesias sólo tuvo palabras de reproche. Ya no estaban activas y vivas: los pocos fieles en Sardis eran como brasas resplandecientes en medio de cenizas; los de Laodicea eran como su abastecimiento de agua, ni frías ni calientes.

Si los laodiceos no hubieran escuchado nunca el evangelio, habrían sido fríos en un sentido espiritual. Suponemos que la primera generación de cristianos en Laodicea aceptó el evangelio y brilló con fuego espiritual y de entusiasmo. Pero sus descendientes eran tibios. No tenían interés en ser testigos de Jesucristo, en vivir una vida de servicio para el Señor, o en predicar y enseñar su evangelio para que avanzaran su iglesia y el reino. Auque tenían las Escrituras, eran apáticos, indiferentes y despreocupados en cuanto a las cosas del Señor (compárese con Heb. 4:2; 6:4). No sorprende que Jesús dijera, «conozco tus obras», con la implicación de que no había ninguna.

c. «Así pues, porque eres tibio y ni frío ni caliente, estoy a punto de vomitarte de mi boca». Las fuentes termales a unos diez kilómetros cerca de Hierápolis enviaban agua de calidad medicinal a Laodicea. Para cuando el agua llegaba a su destino, se había enfriado bastante, y debido al carbonato de calcio que contenía, producía un efecto nauseabundo en quienes la bebían. Por el contrario, Colosas, a dieciocho kilómetros de distancia, disfrutaba de manantiales de agua refrescante, fría y pura.

Cristo no tiene ningún interés en un cristianismo tibio, porque no vale nada. Prefiere trabajar con personas que o arden de energía para hacer lo que les corresponde o que nunca han oído hablar del mensaje de salvación y están dispuestas a escuchar. El agua tibia con carbonato de calcio hace vomitar. De igual modo, los cristianos nominales, vacíos de obras espirituales, son totalmente desagradables para el Señor, y está a punto de vomitarlos de su boca. Nótese que Jesús no dice, «Te vomitaré de mi boca», sino más bien «estoy a punto de vomitarte de mi boca». He aquí la gracia del Señor Jesús ya que da tiempo a los laodicenses para que se arrepientan después de haber leído su carta. Esta misiva tiene como fin cambiar la actitud tibia de los receptores en deseo de trabajar por el Señor, porque la gracia siempre antecede a la condenación (véase v. 19).

La iglesia en Laodicea «no se había vuelto indiferente porque los intereses mundanos habían enfriado su debido fervor, sino que se había vuelto ineficaz porque, al creer que estaban bien dotados espiritualmente, sus miembros habían cerrado la puerta dejando fuera a su verdadero proveedor». Habían excluido a Cristo (compárese con v. 20) y pensaban que podían prescindir de él. Con ello se habían vuelto totalmente ineficaces como iglesia. Sin Cristo la iglesia está muerta.


b. Reproche

3:17–18


17. Porque dices, ‘Soy rico y me he enriquecido y no necesito nada’, pero no sabes que eres desdichado, miserable, pobre, ciego y desnudo».

a. «Porque dices, ‘Soy rico y me he enriquecido y no necesito nada’». El origen de este dicho parece ser el texto hebreo de Oseas 12:8, el cual ofrece semejanzas claras:


    Efraín se jacta,

    «Soy muy rico; me he enriquecido.

    con toda mi riqueza no encontrarán en

    mí ninguna iniquidad o pecado».


Aunque no podemos determinar si los miembros de la iglesia en Laodicea eran ricos o no, sí sabemos que los habitantes del lugar eran ricos y prósperos. El dicho «soy rico y no necesito nada» también se encuentra en una diatriba de Epicteto, quien menciona estas palabras como dichas por un administrador imperial. Quizá el dicho era proverbial entre los ricos. Pero en este caso las palabras salen de la boca de los cristianos en Laodicea, quienes se habían conformado por completo a la ciudadanía. Así pues, en lugar de que la iglesia influyera en la sociedad, había ocurrido lo opuesto, ya que la sociedad influía en la iglesia.

Luego, la palabra rico puede apuntar a posesiones materiales o espirituales. ¿Se identificaron los miembros de la iglesia con los habitantes del lugar quienes en el 60 d.C. habían rechazado la ayuda de Roma cuando un terremoto devastó Laodicea? ¿O sugiere el contexto que entendamos la palabra como referencia a riquezas espirituales? El pasaje anterior (vv. 14–16) y el versículo siguiente (v. 18) obligan a los comentaristas a adoptar la segunda opción. La evidencia indica que la iglesia había adoptado las normas de Laodicea y las había transferido al ámbito espiritual. Por ejemplo, la ciudad, conocida como centro financiero, construyó edificios, puertas y torres grandes poco después de que el terremoto hubo destruido la ciudad. Se enorgullecía de ser independiente y de su capacidad para ayudar a sus vecinas que habían sufrido el mismo desastre. Los miembros de las iglesias estaban muy de acuerdo en mostrar independencia y en ayudar a los vecinos. En consecuencia, no llegaron a ver la diferencia ente riqueza material y espiritual. Se jactaban de su autosuficiencia y no necesitan a Cristo. Eran espiritualmente ciegos.

Tercero, desde un punto de vista lógico, se invierte el orden ser rico y haberse enriquecido. Después de que alguien se enriquece, puede decir, «soy rico». Pero esta inversión de la secuencia esperada se encuentra más a menudo en Apocalipsis (véase 5:2, 5; 10:9) e incluso en el cuarto evangelio: «ángeles de Dios subir y bajar sobre el Hijo del Hombre» (Jn. 1:51).

Por último, no necesitar nada es inconcebible en el caso del verdadero creyente, quien depende de Dios en todo momento, día y noche, para comida y bebida, hogar, techo, vestido, protección, alimento espiritual, aliento, consuelo, amor, gozo, felicidad y muchas otras bendiciones. Ser autosuficiente es el colmo de la arrogancia espiritual, porque ya no están funcionando la fe y la confianza en el Señor.

b. «Pero tú no sabes que eres desdichado, miserable, pobre, ciego y desnudo». El contraste que introduce la partícula adversativa pero es en verdad sorprendente. Jesús dijo, «conozco tus obras» (v. 15) y ahora les dice a los laodicenses que no se conocen a sí mismos. Utiliza el pronombre personal tú en singular para enfatizar que se dirige a la iglesia como un todo. Describe a la iglesia con cinco adjetivos, de los cuales el primero es desdichado (véase Ro. 7:24). Denota la condición mundana de quienes no toman en cuenta las cosas divinas esenciales: la persona rica que carece de la riqueza que cuenta delante de Dios. Además de estar espiritualmente en quiebra, la persona rica es miserable. Pablo utiliza la palabra desdicha o miseria en superlativo cuado escribe acerca de quienes dudan de la resurrección: «Si la esperanza que tenemos en Cristo fuera sólo para esta vida, seríamos los más desdichados de todos los mortales» (1 Co. 15:19). En vez de ser ricos, los laodicenses son espiritualmente pobres porque los bienes materiales los ciegan (compárese con 2 P. 1:9). Y por último, se presentan desnudos delante de Dios y son incapaces de cubrir su vergüenza. Con sólo cinco adjetivos, Jesús ha descrito su lamentable condición. Los dos primeros (desdichado y miserable) reflejan la situación interna de los laodicenses, en tanto que los tres últimos (pobre, ciego y desnudo) describen la condición tanto interna como externa.

18. «Te aconsejo que me compres oro refinado por fuego para que seas rico, y ropas blancas para vestirte para que no se revele la vergüenza de tu desnudez, y colirio para poner en tus ojos para que puedas ver».

Este versículo retoma los tres últimos adjetivos del versículo anterior (v. 17), aunque sin la misma secuencia. Cuando se eliminan estos tres adjetivos (pobre, desnudo y ciego), desaparecen los otros dos (desdichado y miserable). Asimismo, estos tres abarcan todas las bendiciones que necesita el creyente para su salvación: redención, justificación y santificación.

a. «Te aconsejo que me compres oro refinado por fuego para que seas rico». En lugar de un reproche duro y de un mandato contundente, Jesús aconseja a los laodicenses y demuestra su gracia divina. Utiliza el lenguaje del mercado y alude a un pasaje del Antiguo Testamento: «vengan, compren vino y leche sin pago alguno» (Is. 55:1). Se dirige a quienes con descaro afirmaron que no tenían ninguna necesidad, y los invita a que le compren a él oro refinado. Por implicación, desea que acudan a él como mendigos indigentes que nunca podrían comprar este bien precioso. La palabra griega oro se refiere a productos de alta artesanía, como joyas o monedas, y no simplemente al metal mismo (compárese 17:4; 21:18, 21 con 9:7; 18:12). Los cambistas en el banco de Laodicea manejaban dinero a diario, pero Cristo aconseja al pueblo que acuda a él para comprar. Sin embargo, su consejo omite a propósito mencionar el dinero, porque la transacción debe darse sin oferta legal. Sólo pueden conseguir el oro de Jesús.

Nótese, por tanto, la clase de oro que Cristo pone a disposición de los laodicenses: «oro refinado por fuego». Es oro que ha sido purificado hasta tal grado que de él emana el brillo del fuego (véase 1 P. 1:7). Estas palabras sugieren la prueba de fuego que deben enfrentar los seguidores de Cristo. Oro es de hecho otra palabra para fe, que es mucho más preciosa que el oro. La fe debe ser de importancia total para los laodicenses, porque deberían darse cuenta de que Jesús les habla en términos espirituales. Lo que está en juego aquí es que todas las impurezas deben ser eliminadas con fuego, de modo que su fe surja intacta del mismo y, como consecuencia, su amor por Cristo sea puro.

b. «Ropas blancas para vestirte para que no se revele la vergüenza de tu desnudez».En una ciudad donde la industria de la ropa daba trabajo e ingresos a innumerables personas, estas palabras tienen un atractivo directo. La lana negra que producían las ovejas era el color de casi toda la ropa que se fabricaba. Los sacerdotes llevaban ropaje blanco, pero ahora esta vestimenta es la vestimenta escatológica de los santos quienes, con el color blanco, dan testimonio de santidad y pureza. Es una alusión al Anciano de días: «su ropa era blanca como la nieve» (Dn. 7:9; véase Ap. 1:14).

La razón de vestir ropa blanca es cubrir la desnudez del pecado y con ello no ser avergonzado (compárese con 16:15). El Antiguo Testamento ofrece una serie de casos en los que o la realidad o la amenaza de una humillación total se centraban en ser desnudado.

Los cristianos en Laodicea estaban espiritualmente desnudos, «[porque] todos los telares en su ciudad no podían tener ropa para cubrir sus pecados. Laodicea podía proveer a todo el mundo sus túnicas y otras ropas; pero la justicia era la vestimenta blanca que Dios pedía (véase 19:8), y esto lo debían conseguir de Cristo». Sólo Jesús quita el pecado y la culpa, porque sólo él puede proporcionar la túnica blanca de la justicia.

c. «Y colirio para poner en tus ojos para que puedas ver». La escuela de medicina en Laodicea se había familiarizado con las propiedades curativas de la así llamada piedra frigia. Esta piedra, que procedía de la cercana provincia de Frigia, se convertía en polvo con el que se elaboraba un ungüento que se utilizaba para curar enfermedades oculares.

Los creyentes laodicenses estaban ciegos debido a que se engañaban a sí mismos y no eran capaces de ver con ojos espirituales. Con el colirio para los ojos que Jesús proporciona, los laodicenses podrían ver sus propios pecados a la luz de la palabra de Dios y de caminar con Jesús, quien es la luz del mundo.

EL PASTOR QUE FRACASÓ


Un pastor de un pequeño pueblo, llegó a la Iglesia animado y motivado para realizar la reunión de la noche, la hora pasaba y la gente no llegaba.


Después de 15 minutos de atraso entraron tres niños, después de 20 minutos entraron dos jóvenes, entonces el pastor decidió comenzar el culto con las cinco personas.


Al transcurrir el culto entró una pareja que se sentó en los últimos asientos de la iglesia.


Cuando el pastor hacía la lectura de la Biblia para la prédica de la noche entró otro señor, con sus ropas sucias y con una cuerda en sus manos.


Aún sin entender el porqué de la falla del pueblo, el pastor condujo el culto animado y predicó con dedicación y celo. Cuando volvía para su casa fue asaltado y golpeado por dos ladrones que se llevaron su bolso donde estaba su Biblia y otras pertenencias de valor.


Mientras su esposa hacía las curaciones de sus heridas en casa, él describió aquel día como:


 - 𝐄𝐥 𝐝í𝐚 𝐦á𝐬 𝐭𝐫𝐢𝐬𝐭𝐞 𝐝𝐞 𝐬𝐮 𝐯𝐢𝐝𝐚.

 - 𝐄𝐥 𝐝í𝐚 𝐦á𝐬 𝐟𝐫𝐚𝐜𝐚𝐬𝐚𝐝𝐨 𝐝𝐞 𝐬𝐮 𝐦𝐢𝐧𝐢𝐬𝐭𝐞𝐫𝐢𝐨.

 - 𝐄𝐥 𝐝í𝐚 𝐦𝐚𝐬 𝐢𝐧𝐟𝐫𝐮𝐜𝐭í𝐟𝐞𝐫𝐨 𝐝𝐞 𝐬𝐮 𝐜𝐚𝐫𝐫𝐞𝐫𝐚.


Después de cinco años, el pastor decidió compartir esa historia para la iglesia, mientras él terminaba de contar la historia, un matrimonio de gran referencia en aquella congregación interrumpe al pastor y dicen: “Pastor, aquella pareja de la historia que se sentó en el fondo éramos nosotros."


Estábamos al borde del divorcio a causa de varios problemas y diferencias que había en nuestro hogar, en aquella noche decidimos poner un fin a nuestro matrimonio, pero primero decidimos entrar en una iglesia, dejaríamos allí nuestras alianzas y después cada uno seguiría su camino, pero desistimos del divorcio después que oímos la prédica en aquella noche, hoy estamos aquí con el hogar y la familia restaurada; mientras el matrimonio hablaba uno de los empresarios más prósperos que ayudaba en el sustento de aquella iglesia se levantó pidiendo la oportunidad para hablar, y dijo:


"Pastor yo soy aquel señor que entró todo sucio con una cuerda en las manos, estaba al borde de la quiebra, perdido en las drogas, mi esposa y mis hijos se habían ido de casa a causa de mis agresiones, en aquella noche intenté suicidarme, sólo que la cuerda se rompió, cuando iba a comprar otra cuerda, vi la iglesia abierta, y decidí entrar aún estando todo sucio con la cuerda en las manos, en esa noche el mensaje perforó mi corazón y salí de ahí con ánimo para vivir; hoy estoy libre de las drogas, mi familia volvió a casa y me convertí en el mayor empresario del pueblo.


En la puerta de entrada el obrero que recibía las personas gritó:


"Pastor... Yo fui uno de aquellos ladrones que le asaltó, el otro murió en aquella misma noche cuando realizábamos el segundo asalto, en el bolso usted tenía una Biblia, y yo pasé a leerla cuando despertaba por la mañana, despues decidí entrar en esta iglesia.


El pastor quedó en shock y comenzó a llorar junto con el pueblo, al final de aquella noche en que él consideraba como una noche de fracaso fué una noche muy productiva.


🅻🅴🅲🅲🅸🅾🅽🅴🆂 🅳🅴 🅻🅰 🅷🅸🆂🆃🅾🆁🅸🅰:


 𝟏- 𝐄𝐣𝐞𝐫𝐳𝐚 𝐬𝐮 𝐥𝐥𝐚𝐦𝐚𝐝𝐨 𝐜𝐨𝐧 𝐝𝐞𝐝𝐢𝐜𝐚𝐜𝐢ó𝐧 𝐲 𝐜𝐞𝐥𝐨 𝐦á𝐬 𝐚𝐥𝐥á 𝐝𝐞𝐥 𝐧ú𝐦𝐞𝐫𝐨 𝐝𝐞 𝐩𝐚𝐫𝐭𝐢𝐜𝐢𝐩𝐚𝐧𝐭𝐞𝐬.


 𝟐- 𝐃é 𝐬𝐮 𝐦𝐞𝐣𝐨𝐫 𝐞𝐬𝐟𝐮𝐞𝐫𝐳𝐨 𝐭𝐨𝐝𝐨𝐬 𝐥𝐨𝐬 𝐝í𝐚𝐬, 𝐩𝐮𝐞𝐬 𝐜𝐚𝐝𝐚 𝐝í𝐚 𝐞𝐬 𝐮𝐧 𝐢𝐧𝐬𝐭𝐫𝐮𝐦𝐞𝐧𝐭𝐨 𝐩𝐚𝐫𝐚 𝐥𝐚 𝐯𝐢𝐝𝐚 𝐝𝐞 𝐚𝐥𝐠𝐮𝐢𝐞𝐧.


 𝟑- 𝐄𝐧 𝐥𝐨𝐬 𝐝í𝐚𝐬 𝐦á𝐬 𝐦𝐚𝐥𝐨𝐬 𝐝𝐞 𝐬𝐮 𝐯𝐢𝐝𝐚 𝐮𝐬𝐭𝐞𝐝 𝐚ú𝐧 𝐩𝐮𝐞𝐝𝐞 𝐬𝐞𝐫 𝐮𝐧𝐚 𝐛𝐞𝐧𝐝𝐢𝐜𝐢ó𝐧 𝐞𝐧 𝐥𝐚 𝐯𝐢𝐝𝐚 𝐝𝐞 𝐚𝐥𝐠𝐮𝐢𝐞𝐧.


 𝟒- 𝐄𝐥 𝐝í𝐚 𝐪𝐮𝐞 𝐮𝐬𝐭𝐞𝐝 𝐜𝐨𝐧𝐬𝐢𝐝𝐞𝐫𝐚 𝐜𝐨𝐦𝐨 𝐞𝐥 𝐝í𝐚 𝐦á𝐬 𝐢𝐧𝐟𝐫𝐮𝐜𝐭í𝐟𝐞𝐫𝐨 𝐝𝐞 𝐬𝐮 𝐯𝐢𝐝𝐚 𝐞𝐧 𝐥𝐚 𝐭𝐢𝐞𝐫𝐫𝐚 𝐚 𝐥𝐚 𝐯𝐞𝐫𝐝𝐚𝐝 𝐞𝐬 𝐞𝐥 𝐝í𝐚 𝐦á𝐬 𝐩𝐫𝐨𝐝𝐮𝐜𝐭𝐢𝐯𝐨 𝐞𝐧 𝐞𝐥 𝐦𝐮𝐧𝐝𝐨 𝐞𝐬𝐩𝐢𝐫𝐢𝐭𝐮𝐚𝐥.


 𝟓- 𝐃𝐢𝐨𝐬 𝐮𝐬𝐚 𝐥𝐚𝐬 𝐜𝐢𝐫𝐜𝐮𝐧𝐬𝐭𝐚𝐧𝐜𝐢𝐚𝐬 𝐦𝐚𝐥𝐚𝐬 𝐝𝐞 𝐥𝐚 𝐯𝐢𝐝𝐚 𝐩𝐚𝐫𝐚 𝐩𝐫𝐨𝐝𝐮𝐜𝐢𝐫 𝐠𝐫𝐚𝐧𝐝𝐞𝐬 𝐯𝐢𝐜𝐭𝐨𝐫𝐢𝐚𝐬.


 𝟔- 𝐍𝐮𝐧𝐜𝐚 𝐝𝐢𝐠𝐚: "𝐇𝐨𝐲 𝐃𝐢𝐨𝐬 𝐧𝐨 𝐡𝐢𝐳𝐨 𝐧𝐚𝐝𝐚." 𝐒𝐨𝐥𝐨 𝐩𝐨𝐫 𝐞𝐥 𝐡𝐞𝐜𝐡𝐨 𝐝𝐞 𝐪𝐮𝐞 𝐭𝐮𝐬 𝐨𝐣𝐨𝐬 𝐧𝐨 𝐯𝐢𝐞𝐫𝐨𝐧 𝐞𝐬𝐨.


¡𝐃𝐢𝐨𝐬 𝐛𝐞𝐧𝐝𝐢𝐠𝐚 𝐚 𝐭𝐨𝐝𝐨𝐬!


 𝘾𝙧é𝙙𝙞𝙩𝙤𝙨: 𝘼𝙪𝙩𝙤𝙧 𝙙𝙚𝙨𝙘𝙤𝙣𝙤𝙘𝙞𝙙𝙤

EL ORIGEN DEL MIEDO

Cuando leemos la Biblia nos damos cuenta que el diablo es el inventor del miedo. Es en base a éste, que sostiene todo su imperio. Por eso es que la mayor parte de sectas y religiones falsas también reclutan gente amparadas en el miedo, la manipulación y el control que ejercen sobre las personas. Muchos de sus miembros, al darse cuenta que están involucrados en algo falso, buscan salir o huir, pero son retenidos a la fuerza, bajo amenaza, junto a sus familias. A causa de esto, deben permanecer en esclavitud toda su vida. 

“14 Así que, por cuanto los hijos participaron de carne y sangre, él también participó de lo mismo, para destruir por medio de la muerte al que tenía el imperio de la muerte, esto es, al diablo, 15 y librar a todos los que por el temor de la muerte estaban durante toda la vida sujetos a servidumbre”. 

Hebreos 2:14, 15 

Es totalmente cierto que el imperio de la muerte que el diablo rige, se sostiene en base al miedo o temor.


MIEDO

El miedo nos impide actuar 

Es interesante saber que la Biblia coloca a los cobardes en la misma categoría de los incrédulos, los abominables y los homicidas. 

Pero los cobardes e incrédulos, los abominables y homicidas, los fornicarios y hechiceros, los idólatras y todos los mentirosos tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre, que es la muerte segunda”. Apocalipsis 21:8 

La pregunta es: ¿por qué lo hace? 

● Porque la palabra enseña que todo lo que no proviene de fe es pecado. 

“ 23Pero el que duda sobre lo que come, se condena a sí mismo, 

porque no lo hace con fe; y todo lo que no proviene de fe, es pecado”. Romanos 14:23 

● Porque la fe sin obras es muerta. 

La fe sin una acción correspondiente, es muerta. El miedo o temor nos paraliza y no nos deja actuar, por tanto, mata nuestra fe; y todo lo que no proviene de fe es pecado. 

Es por esta razón que los cobardes no entrarán al Reino de los cielos y serán castigados en el fuego eterno, por no actuar. 

El cobarde es alguien que no actúa, que no hace las cosas por fe; es alguien que no interviene en tiempos de crisis, cuando hay problemas difíciles de resolver o cuando se encuentra en medio del peligro. Por el contrario, es un individuo que huye y no actúa debido al miedo. Aunque todos en algún momento nos hemos enfrentado al miedo, ése no es el problema; el problema es no actuar, es quedarnos paralizados. 

Si no actuamos a causa del miedo, entonces pasamos a formar parte de la lista a la que se refiere el libro de Apocalipsis. Hay muchas personas que no actúan frente al llamado, otros no confrontan el peligro. Otros más no actúan para salvar a su familia o negocio, simplemente porque tienen miedo. Pero si superamos nuestros miedos y actuamos en fe, estamos haciendo una acción correspondiente. Aunque tengamos miedo de hacer algo, hagámoslo de todos modos; sólo así obtendremos grandes resultados en nuestra vida.

Ilustración: Los bomberos sienten miedo cada vez que se les presenta un incendio; sin embargo, mientras todo el mundo corre para salvar su vida, ellos tienen que correr en dirección a las llamas para apagarlas. Ellos hacen la acción correspondiente.



NOMBRES DE DIOS


GRATITUD

Si estás bajo presión financiera, no comiences a quejarte porque estarás expresando exactamente lo que quiere el enemigo: Duda, temor y preocupación… “¿Te olvidaste cómo cuidé de ti en el pasado? Cuando escuches la palabra “RECESION”, recuerda otras dos palabras “RECUERDO Y REGOCIJO”. 

¿Recuerdas como cuidé a Israel en el desierto? (Deuteronomio 2:7). ¿Recuerdas como cuidé a Elías en los tiempos de hambre? (1 Reyes 17:7, 16). ¿Recuerdas como cuidé a Eliseo y a la viuda? (2 Reyes 4:6) ¿Recuerdas como cuidé a Samaria en tiempos de hambre? (2 Reyes 7:8) ¿Recuerdas cómo mi Hijo alimentó a las multitudes que lo siguieron? (Mateo 14:20) Ahora, recuerda que prometí cuidarte (Filipenses 4:19). Comienza a regocijarte por fe mientras meditas en estas cosas. El regocijo con propósito aumenta tu fe. El enemigo quiere que sólo pienses en lo malo; Yo quiero que habites en Mi bondad y fidelidad. 

Comienza recordando y regocijándote. YO SOY TU PROVEEDOR. (Salmos 104:27-28) Sí, este tiempo llegará a su fin y cuando lo haga, te alegrarás de haberte mantenido firme y haber esperado en Mí (Salmo 130:5)

KABBALAH O CÁBALA

La Kabbalah o Cábala, usada por primera vez en el siglo I o II d.C por el judío Shimon Bar Yojai, usa como base la Torah pero es un método tan descontextualizado que hasta hay una rama de la cábala que usa la magia negra para dominar a los demonios "No sea hallado en ti ... ni mago, ni quien consulte a los muertos. Porque es abominación para con Jehová cualquiera que hace estas cosas." (Deuteronomio 18: 10-12).

Según cuenta la leyenda, el judío sefardí Yosef de la Reina (siglos XV- XVI d.C) uso la magia negra con la intención de traer a Elías y con este al Mesías.Tras invocar a diversas autoridades, supuestamente angélicas, estas le dieron el "tetragrámmaton de plomo" con el que serian capaces de atrapar a satanás y entregárselo a Dios para su juicio: Algunos de sus acompañantes terminaron muertos, otros locos, Yosef de la Reina consiguió huir pero pocos años después se suicido.

El Zoár, la rama de la Kabbalah mas reconocida, usa métodos esotéricos y en su estado gnóstico asegura que por el conocimiento pleno de la Torah, se puede llegar a conocer plenamente a Dios (Juan 1:18).

Es un tema demasiado tedioso y extenso para tratar por aquí, pero llega a tal extremo de herejía que asegura que por medio de las Sefirot (árbol de la vida) se puede llegar a trazar los diez aspectos de la personalidad de Dios, incluyendo sus genitales ubicado en la décima sefirot, llamada Malchuth.

-Conclusión aplicativa-
No es suficiente con tener conocimiento de las Sagradas Escrituras, si este no va acorde a la sana doctrina se convierte en herejía y un arma de destrucción.
Entiéndase por sana doctrina todo aquello que las Escrituras dicen en su contexto y no lo que nosotros pretendemos que estas digan.

⇩⇩⇩⇩⇩⇩ Árbol cabalístico de las Sefirot ⇩⇩⇩⇩⇩⇩

SALMOS



NUEVO TESTAMENTO


ESPÍRITU SANTO


YO SOY


VASIJA ROTA

ERES UNA VASIJA ROTA!!🥺
-Me lo dijo hace un par de semanas en tono juicioso.
La miré a los ojos y sonreí - Ya lo sabía -
le respondí. ☺️
Sonreí, porque al instante vinieron a mi mente los procesos de restauración qué viví los últimos años.

Porque sabemos los que hemos sido procesados, que cuando nuestra vasija es completamente quebrada, indudablemente quedaran  marcas que muchos observarán para minimizarte, ridiculizarte públicamente o menospreciar tus marcas.
PERO SONREÍ

🌾SONREÍ,  porque me sentía orgullosa, me sentí valiosa, que aún con cada grieta,  Mi vasija fue movida, promovida y llevada de lugar en lugar por las manos de Uno que me vio Útil.
🌾SONREÍ, porque pude mirar atrás, por  un pequeño instante el camino por el cual había transitado.
🌾SONREÍ, porque miré que sobre esa tierra árida y seca, a través de mis grietas se colaban gotas de agua que regaban las veredas.
🌾SONREÍ, porque había flores de lindos colores que nacieron al ser regadas por el agua que se escapó de mis grietas. Tal como lo leí en un cuento.
Dios restaura Vasijas Rotas.

Claudia Apolinars🥰

OBEDIENCIA


PESAJ




CRISTIANOS Y COVID 19

Resultado de imagen de PLAGAS BIBLICASComo el resto de la población, estamos sumidos en el natural miedo y zozobra causados por el avance aparentemente inexorable de un virus tan contagioso como cualquiera de las “plagas” históricas que azotaron Europa en el Medioevo o después, como la peste negra o la cólera, y esto, a pesar de todos los avances en las ciencias médicas y los cuidados sanitarios de los tiempos modernos.
Por nuestros televisores, radios y móviles, etc., hemos asistido y a veces todavía asistimos a escenas de auténtico pánico colectivo provocado por el miedo cerval a este enemigo invisible y silencioso que no respeta ni personas ni espacios ni fronteras, llevándonos a preguntar reiteradamente: “¿Quiénes van a ser los próximos que caerán en el contagio?”
Es natural que la mayoría de la población acepte, con la resignación fatalista de siempre, que desastres naturales como éste han pasado muchas veces en la historia de la humanidad; forma parte de la experiencia colectiva de ella, así que “¿Qué le vamos a hacer?”, preguntan.
Pero el pueblo evangélico no puede aceptar el fatalismo de los demás. Nosotros creemos firmemente que nuestro Dios sigue en el puesto de mando del universo, y que no acontece nada que Él desconoce, ni nada que escape a su control o que Él no manda o permite. Dice Isaías 55:8-9 que sus pensamientos no son los nuestros. Entonces, ¿por qué lo ha permitido en esta ocasión? ¿De qué manera puede tamaño desastre servir a sus propósitos?
No nos toca especular en estos momentos, sino aceptar que tales crisis nos han de recordar forzosamente cual ha de ser nuestra responsabilidad particular en medio de ésta, como ha hecho el pueblo de Dios en incontables ocasiones en el pasado. Cuando desastres naturales, guerras, o plagas que han amenazado naciones y hasta continentes enteros, han caído sobre pueblos o naciones, el pueblo de Dios ha sido movido a intervenir en súplica ferviente al Señor, nuestro gran Sumo sacerdote, Jesucristo, quien, como dice Hebreos 1:3 y 7:25 (DHH): “Después de limpiarnos de nuestros pecados se ha sentado en el Cielo, a la derecha del trono de Dios” desde donde “vive para siempre para interceder...por los que se acercan a Dios por medio de Él”.
Nuestro principal privilegio y responsabilidad e interceder para que la voluntad de Dios se cumpla en la tierra como en el cielo.
Hay varias ocasiones en la historia del pueblo de Dios que hablan de crisis suscitadas por plagas severas, y una de ellas me ha llamado poderosamente la atención en la situación actual que atravesamos. Me refiero a la plaga mortífera que amenazaba a todo el pueblo, que surge al final del capítulo 16 de Números, y que fue, cual fuego devorador, extinguido, por la acción resoluta y arriesgada del sumo sacerdote Aarón, que con su incensario en la mano, corrió para ponerse “entre los vivos y los muertos” a fin de salvar a su pueblo.
Así, esta narración dramática plantea un mensaje desafiante muy claro para el pueblo evangélico en la crisis actual del Coronavirus o Covid-19. Nuestro principal privilegio y responsabilidad, a la par con la adoración y el testimonio, es interceder, sintonizando, para así decirlo, con lo que Jesús está haciendo, para que la voluntad de Dios se cumpla en la tierra como en el cielo, como nos enseñó en la oración del Padrenuestro. Números capítulo 16 nos ilustra gráficamente que nuestra responsabilidad primordial en esta crisis inédita es colocarnos rápida y firmemente entre los vivos y los muertos, como hizo Aarón, en el Nombre del Señor, con nuestro “incensario” en la mano, para pedir:
1) que el Señor tenga misericordia de la humanidad y se digne mandar cesar esta plaga;
2) que los distintos equipos de investigadores que trabajan buscando algún fármaco o sustancia que frene o bloquea la expansión del virus, lo encuentren lo antes posible;
3) que las distintas empresas farmacéuticas se pongan de acuerdo para fabricar y distribuir dicha sustancia lo antes posible y en cantidades suficientes para aplicarlo a todos los contagiados habidos y por haber, hasta que el virus deje de estar operativo;
4) que toda la alarma, el miedo y la agitación global suscitado por esta crisis sirva para que las naciones reflexionen seriamente sobre los verdaderos valores humanitarios y de solidaridad y mutua ayuda, que a menudo somos tan propensos a soslayar o incluso olvidar, y nos lleven a buscar una renovada solidaridad y cooperación entre todas las naciones y pueblos de la tierra, aparcando tantas cosas que nos separan o distancian.
5) finalmente, en cuanto al pueblo de Dios, que sirva para darnos cuenta de una vez que tenemos una oportunidad de oro, de mostrar en qué consiste nuestra verdadera unidad y comunión en Cristo, por encima de diferencias denominacionales y eclesiales, uniéndonos en la oración intercesora movida por el Espíritu de Dios, de acuerdo con la nueva vida de servicio sacrificial por amor al prójimo, tal como nos enseñó a hacer con su vida y muerte nuestro común Maestro y Señor. Sobre todo, que nos sirva de aldabonazo divino a nuestras conciencias adormiladas acerca del verdadero “porqué” estamos en este mundo (1 Pedro 2:9- 10; notemos la colocación destacada de la frase “real sacerdocio” en el v. 9). El pueblo de Dios debe arrepentirse de su relajación en la llamada bíblica de la misión de Dios de rescate y salvación, mediante una reflexión seria en cuanto a sus prioridades tanto como está viviendo como su proclamación verbal del evangelio, que deben ir a la par.
Y para el descargo de esta sagrada responsabilidad, basta una sola de las numerosas y maravillosas promesas que el Señor otorga a sus sacerdotes, en Juan 14:12-13, RVR60: “De cierto, de cierto os digo: El que en mí cree, las obras que yo hago, él las hará también: y aun mayores hará, porque yo voy al Padre. Y todo lo que pidiereis al Padre en mi Nombre, lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo”. ¿Qué más queremos?
A la luz de todo lo visto, estoy convencido que la urgencia de movernos decididamente para ejercer el papel que nos ha tocado en la crisis actual se asemeja a la de la reina Ester (Ester 4:14b), una crisis que amenazaba con la muerte y destrucción de toda su familia y el resto del pueblo de Dios esparcidos por el imperio persa. Su primo Mardoqueo, que vio claramente la situación y que tanto dependía de Ester, como el último recurso que pudiera intervenir para salvar la situación, pregunta a la joven: “¿Quién sabe si no has llegado al trono para un momento como éste?”

CRISTIANISMO Y FEMINISMO


Resultado de imagen de MUJERES CRISTIANAS FEMINISTASMujeres protestantes fueron promotoras en el siglo XIX de la abolición de la esclavitud y un feminismo bíblico, aunque la deriva posterior se ha alejado de los principios de aquellas mujeres.

Marianne Weber y otras mujeres protestantes fueron promotoras en el siglo XIX de la abolición de la esclavitud, formando un conjunto de mujeres luchadoras. Fue un movimiento rompedor abriendo brechas para que el feminismo surgiera, aunque desgraciadamente la deriva posterior hacia un feminismo radical se ha alejado de los principios que movieron a aquellas mujeres.



Como mujeres evangélicas nos proponemos que se mire a la mujer como Dios nos ve y nos creó. Llamados junto con los hombres a ser mayordomos de la creación. Por eso no nos podemos identificar con este tipo de feminismos, sino con el de Jesús, que fue el primer feminista al defender a la mujer y devolverle su lugar, en contra de lo que la sociedad de aquel tiempo valoraba a la mujer, que era un cero a la izquierda.

 Hay hombres y mujeres machistas, porque el machismo es una forma de ver al mundo, y a la mujer como un ser de segunda categoría.
Este machismo en el contexto cristiano considera esta frase de Dios como un castigo, pero al igual que le dice al hombre que ganará el pan con el sudor de su frente y que la tierra estará maldita por su culpa, no es una orden, sino la simple consecuencia de la separación de Dios.
Nosotros queremos volver a los principios bíblicos de igualdad en derechos y complementariedad. No enfrentando a hombre y mujer, sino trabajando juntos en la sociedad y en la iglesia.

BIBLIA Y MICROBIOLOGÍA

Actualmente se conoce como “cuarentena” el periodo de aislamiento preventivo al que se somete a una persona por razones sanitarias. Todavía hoy se le llama así porque en sus orígenes bíblicos ese período de tiempo correspondía a 40 días. 
Por ejemplo, en Levítico 12:1-4, a propósito de la purificación de la mujer judía después del parto, se dice: Habló Jehová a Moisés, diciendo: Habla a los hijos de Israel y diles: La mujer cuando conciba y dé a luz varón, será inmunda siete días; conforme a los días de su menstruación será inmunda. Y al octavo día se circuncidará al niño. Mas ella permanecerá treinta y tres días purificándose de su sangre; ninguna cosa santa tocará, ni vendrá al santuario, hasta cuando sean cumplidos los días de su purificación. Estos días de la purificación femenina eran siete, por dar a luz, más 33, por la purificación de su sangre, lo cual suma en total 40 días (una cuarentena).
Actualmente, a la cuarentena se le llama médicamente “puerperio” y es el tiempo que pasa desde el parto hasta que el aparato genital femenino vuelve al estado anterior al embarazo. Suele durar entre seis y ocho semanas, es decir, alrededor de 40 días, tal como dice la Biblia. La cuarentena es un período duro para la madre por el trasiego hormonal que ésta sufre y por la influencia que esto tiene sobre su estado de ánimo. El útero empieza a reducirse y los pechos a segregar leche. Por un lado, se reducen unas hormonas (como los estrógenos y la progesterona), mientras que por otro sube la prolactina (hormona encargada de la producción láctea) así como la oxitocina (hormona que contrae el útero). De manera que la cuarentena postparto es un periodo delicado en la vida de la mujer, que la medicina moderna ha reconocido como tal y ha corroborado por completo.
Una vez más, resulta sorprendente cómo los hebreos de la antigüedad pudieron tener tal conocimiento de la fisiología femenina, a no ser por supuesto que les fuera revelado.

Prevención de infecciones bacterianas

En la Biblia aparecen ciertas disposiciones concretas, dentro de las reglamentaciones de impureza religiosa ritual, que también tuvieron aplicaciones sanitarias muy beneficiosas para el pueblo hebreo. En una época en la que se desconocían los microbios patógenos (bacterias, hongos, protozoos, etc.) o los virus y priones (o proteínas priónicas), que podían causar enfermedades mortales, las Escrituras previenen determinados comportamientos y ponen de manifiesto así la sabiduría infinita que subyace detrás de sus páginas.
Por ejemplo, en Lv. 13:45-46, se legisla contra la lepra: Y el leproso en quien hubiere llaga llevará vestidos rasgados y su cabeza descubierta, y embozado pregonará: ¡Inmundo! ¡Inmundo! Todo el tiempo que la llaga estuviere en él, será inmundo; estará impuro, y habitará solo; fuera del campamento será su morada. La lepra es una enfermedad infecciosa causada por una bacteria (Mycobacterium leprae) que se caracteriza por provocar lesiones y heridas en la piel, las mucosas y el sistema nervioso periférico. Aunque es difícil, el contagio se puede producir de persona a persona a través de gotitas nasales y orales. Hoy es posible curarla y la Organización Mundial de la Salud (OMS) facilita un tratamiento con múltiples medicamentos (TMM) gratuitamente a todos los enfermos de lepra. Sin embargo, en la época bíblica, el hecho de hablar con un leproso o estar junto a él era peligroso, de ahí que la única medida efectiva para evitar los contagios fuera la segregación o separación de tales enfermos del resto de la sociedad. ¿Cómo sabía el autor del Pentateuco la causa del contagio de la lepra si aún no se conocían las bacterias?
De la misma manera, en Nm. 19:11 se dice: El que tocare cadáver de cualquier persona será inmundo siete días. ¿Hay algún problema sanitario, aparte de las prescripciones de impureza religiosa, en el hecho de tocar los cadáveres? Si la persona fallecida presenta alguna enfermedad infecciosa, los microbios causantes de la misma pueden sobrevivir en el cadáver durante dos o más días. Enfermedades como la tuberculosis, la hepatitis B y C, ciertas afecciones diarreicas y otras muchas dolencias susceptibles de contagio, pueden transmitirse por el contacto con los cadáveres. El virus de VIH (SIDA), por ejemplo, puede sobrevivir hasta seis días en un cadáver. De ahí que exista cierto riesgo de contagio al manipular difuntos infectados y que, quienes se ven obligados a hacerlo, deban usar guantes y lavarse frecuentemente las manos.
Por tanto, la Biblia es coherente con las enseñanzas que transmite al ser humano y su sabiduría es anterior a los descubrimientos científicos recientes.

Esterilización y lavamientos frecuentes

La costumbre hebrea de lavarse el cuerpo, las manos y los pies frecuentemente en agua limpia o corriente (Lv. 15) se fundamenta también en la Biblia. Los judíos tenían dos tipos de lavamiento: uno para propósitos religiosos de purificación, que incluía todo el cuerpo, y otro, que era el lavado ordinario de manos y pies, que se practicaba a diario y se aplicaba también a vasos o recipientes utilizados en las comidas (Mt. 25:2; Mc. 7:3-4). Las seis tinajas de agua mencionadas en la boda de Caná servían precisamente para dicho propósito (Jn. 2:6). Sin embargo, los fariseos multiplicaron innecesariamente los actos por los que uno podía quedar contaminado, lo que requería frecuentes lavamientos ceremoniales, que Jesús criticó acusándoles de hipocresía (Mc. 7:2-3).
A pesar de todo, no cabe duda de que tales medidas higiénicas -tanto por motivos religiosos como sanitarios- contribuyeron a proteger la salud de los hebreos, en una época en la que no se sabía nada acerca de los microbios perjudiciales. Es, por tanto, razonable creer que la sabiduría divina estaba detrás de tales medidas sanitarias que se transmitieron de generación en generación.

Plantas medicinales

En Ezequiel (47:12) se hace alusión -dentro del marco general de la visión del profeta acerca del río que nace del templo de Jerusalén- de los frondosos árboles de sus riberas con frutos comestibles y de cuyas hojas podían obtenerse medicinas. Esto demuestra que los hebreos -como otros pueblos- conocían y usaban las plantas medicinales.

El vino como terapia

En la parábola del buen samaritano (Lc. 10:34), Jesús explica que a las heridas se les echaba “aceite y vino” antes de vendarlas. En mi libro: Parábolas de Jesús en el mundo postmoderno (Clie, 1998) puede leerse:
“El aceite es conocido ya en el Antiguo Testamento como un líquido capaz de disminuir el dolor de las heridas (Is. 1:5-6); mientras que la acidez del vino, con sus efectos antisépticos, sustituía a nuestro actual alcohol. La farmacia ha aprovechado el aceite desde siempre para disolver en él principios activos de la más diversa condición. Se ha utilizado como disolvente de otras grasas, ceras, colofonia, etc., para preparar numerosos ungüentos y pomadas. El famoso farmacéutico español, Font Quer, escribe en su Dioscórides: “Para otras heridas y llagas, se agitan asimismo en una botella, a partes iguales, aceite y vino tinto. Dícese que esta mezcla es un cicatrizante maravilloso” (Font Quer, 1976: 744). De manera que el vino desinfectaba y el aceite calmaba.”
De la misma manera, el apóstol Pablo recomienda a Timoteo (1 Ti. 5:23) que no beba agua sino que la sustituya por “un poco de vino por causa de tu estómago y de tus frecuentes enfermedades”. El agua en aquella época podía contaminarse fácilmente y contener microbios peligrosos, mientras que el vino no, ya que el alcohol del vino era un buen desinfectante. Por supuesto, hay que hacerlo con moderación para no embriagarse. De ahí que el apóstol hable de “un poco de vino”. Hoy se ha puesto de moda la “vinoterapia” para referirse al uso terapéutico del vino con el fin de mejorar la salud de las personas. Sabemos que el vino contiene alcoholes como los polifenoles (resveratrol y flavonoides) y que tiene capacidad antioxidante. Mejora el sistema cardiovascular y la circulación sanguínea, retrasando el envejecimiento de la piel al neutralizar los radicales libres.
La sabiduría que hay detrás de estos remedios domésticos de los hebreos y de otros pueblos de la antigüedad ha sido corroborada por la ciencia moderna.

Alimentos peligrosos

El libro de Levítico (11:30) se refiere a los cocodrilos y los incluye en la lista de animales impuros que los hebreos no podían consumir. Es sabido que algunos de estos animales eran divinizados por las culturas periféricas al pueblo hebreo y que dicho rechazo seguramente tenía motivaciones religiosas. No obstante, además de esto, hoy sabemos que también eran importantes los motivos puramente sanitarios. En aquella época, no se podía saber por qué era peligroso comer la carne de los reptiles, sin embargo actualmente conocemos bien su posible toxicidad.
El consumo de la carne de los reptiles -como cocodrilos, tortugas, lagartos o serpientes- puede causar diversas enfermedades y problemas de salud (triquinosis, pentastomiasis, gnatostomiasis, esparganosis, etc.) por la presencia de bacterias patógenas en ella, especialmente bacterias de los géneros Salmonella, Shigella, Yersinia, Campylobacter, Clostridium y Staphylococcus. De ahí que las autoridades sanitarias recomienden hoy congelar la carne de estos animales antes del consumo humano y no comerla nunca cruda, con el fin de evitar los posibles riesgos para la salud. Las Sagradas Escrituras reflejan una sabiduría que supera con creces los conocimientos humanos de la época.

Notas
[1] Cruz, A. 1998, Parábolas de Jesús en el mundo postmoderno, CLIE, Terrassa, p. 333.