CHRISTABEL PANKHURST, UNA SUFRAGISTA EVANGELISTA

La hija mayor de la famosa sufragista Emmeline Pankhurst, Christabel Pankhurst, siguió los pasos de su madre, como también hicieron sus otras dos hermanas, Sylvia y Adela. Fue quizás la que más cerca estuvo de los ideales de su madre en su totalidad y quien estuvo a su lado en momentos fundamentales como la fundación del partido sufragista del que fueron inspiradoras o uno de los periódicos en favor de los derechos de las mujeres más determinante en su lucha. Fue la única de las hermanas Pankhurst que siguió junto a su madre en lo referente a las ideas pro-belicistas del partido sufragista en la entrada de Inglaterra en la Gran Guerra, mientras sus otras dos hermanas siguieron caminos más pacifistas. Christabel fue una sufragista incansable, que fue encarcelada en varias ocasiones. Pero su labor dio sus frutos y pudo ver a las mujeres inglesas votar y aspirar a ser votadas. Christabel Pankhurst terminó sus días en los Estados Unidos donde se unió a una corriente religiosa evangelista.

Christabel Pankhurst nació el 22 de septiembre de 1880, en Old Trafford, Manchester. Fue la mayor de los cinco hijos, tres niñas y dos chicos, de la sufragista Emmeline Pankhurst y Richard Pankhurst, un abogado socialista que defendió toda su vida las ideas feministas de su esposa y sus hijas. Christabel creció en un ambiente marcado por las ideas políticas socialistas y feministas. La familia Pankhurst vivió un tiempo en Londres donde los hijos de la pareja escuchaban las reuniones que se realizaban en su casa y empezaban a asistir a mitines políticos. Pero en 1898 Emmeline y sus hijos recibieron el duro golpe de la muerte de Richard Pankhurst. Además de sufrir la pérdida de un ser tan querido como Richard, la familia quedó en una situación política precaria. 


Así que Emmeline tuvo que vender su casa de Londres y regresar a Manchester donde se instaló con sus hijos en un hogar más humilde y empezó a trabajar en la oficina de registros de nacimientos y decesos de la ciudad. Christabel continuó sus estudios mientras ayudaba a su madre en casa y en su trabajo.
Tras recibir una buena educación en Manchester, en la High School for Girls, en 1901 Christabel conoció a Eva Gore-Booth, miembro de la National Union of Women's Suffrage Societies (NUWSS) quien la convenció a ella y a su madre para que formaran parte de la organización. Sylvia Pankhurst, hermana pequeña de Christabel, también se unió a ellas, aunque pronto se dieron cuenta de que las ideas de la NUWSS eran demasiado teóricas y un poco alejadas de la realidad. En 1903, Emmeline y Christabel fundaron su propio partido sufragista, la Women's Social and Political Union (WSPU), conocida popularmente como las Suffragettes.

Christabel compaginaba su trabajo con las sufragistas con sus estudios de derecho en el Owens College de Manchester. En 1905, Christabel junto a otras sufragistas acudieron a un mitin del partido laborista inglés donde empezaron a gritar consignas en favor del derecho al voto de las mujeres. Arrestada y obligada a pagar una multa que no quiso abonar, Christabel terminó en prisión junto a otras de sus compañeras. Aquel hecho tuvo gran trascendencia en los medios de la época y consiguió que muchas mujeres se unieran a la causa sufragista.

Al año siguiente se graduaba en derecho en la universidad de Manchester pero su condición de mujer le impedía ejercer de abogado, así que se trasladó a vivir a Londres donde fue nombrada secretaria de organización del WSPU. Los siguientes años los actos reivindicativos de las sufragistas fueron incrementando su violencia. Chistabel fue encarcelada en varias ocasiones más y en una de ellas, en 1912 huyó a Francia para evitar la cárcel.



Pocos meses después volvía a Inglaterra. Eran los tiempos previos a la Primera Guerra Mundial y el movimiento sufragista de Emmeline y Christabel Pankhurst se aliaron con el gobierno en defensa del conflicto armado contra Alemania. Momento en el que tanto Sylvia como Adela Pankhurst se distanciaron de su madre y hermana por no compartir sus ideas belicistas.

El periódico del WSPU, The Suffragette, cambió el nombre por otro más patriótico, el Britannia, bajo el lema "Por el rey, por la patria, por la libertad" se puso al servicio de la causa bélica.

En 1918 el sufragismo vivía un momento histórico cuando la Representation of the People's Act aprobó el sufragio femenino para mujeres mayores de 30 años. La propia Christabel Pankhurst se presentó por el Women's Party de Smethwick y, a pesar de que no salió elegida, a punto estuvo de conseguirlo.

Años después se marchó a vivir a los Estados Unidos donde se unió al movimiento evangelista Second Adventist. Volvió una vez más a Inglaterra en los años treinta cuando recibió el nombramiento de Dame Commander of the British Empire. Regresó definitivamente a los Estados Unidos donde vivió hasta su muerte, el 13 de febrero de 1958.

LOS BIENAVENTURADOS

Antonio Cruz que “no existe otro pasaje de la Escritura que haya sido tan escudriñado como este y haya marcado tanto las diversas corrientes teológicas dentro del cristianismo a lo largo de la historia”. El autor se refiere a las bienaventuranzas, que ocupan gran parte del capítulo cinco en el Evangelio escrito por Mateo. Cruz cambia el sustantivo “bienaventuranza” por el adjetivo “bienaventurados”. Lo hace así en el título de portada, porque el triple mensaje de las bienaventuranzas lo dirige al individuo, a la persona. Por todas partes se ven corazones dolientes, almas en tinieblas, vidas marchitas, mujeres y hombres que arrastran su cansancio físico y su muerte espiritual por los caminos del mundo.

 Las bienaventuranzas contienen un mensaje de redención y de esperanza. Mateo introduce el sermón de las bienaventuras diciendo que Jesús, al ver las multitudes en la cercanía, abrió su boca para enseñarles. No que antes la tuviera cerrada. Hasta entonces había abierto la boca de los profetas, ahora abría la suya propia. Esto es, hablaba por sí mismo. Lo que iba a proponer eran asuntos grandes y divinos. 

Misterios que hasta entonces había callado. En este sermón llama bienaventurados a los que lo son, no en la posesión del día a día, sino en la esperanza; a los que ascienden como por grados a la felicidad. Es esto lo que lleva al autor a subtitular su libro “descubra los secretos de una vida cristiana feliz”. Él lo es. 

EL CIELO... NO ES EL FIN DEL MUNDO


El Cielo... no es el fin del mundo 
Una teología bíblica de los nuevos cielos y la nueva tierra 


¿Te has preguntado cómo pasarás la eternidad? ¿Crees que te la pasarás flotando en las nubes y tocando el arpa? Para la mayoría de nosotros, ¡eso suena muy aburrido!

Pero la promesa bíblica para el futuro no es la de huir del mundo e irnos para el cielo, sino la de vivir en una nueva creación. La última escena de la Biblia no es la de nuestras almas incorpóreas subiendo de la tierra hacia el cielo, sino la de la Nueva Jerusalén bajando del cielo… ¡hacia la tierra!

Este libro explora la teología bíblica de los nuevos cielos y la nueva tierra. Haciendo un recorrido desde Génesis hasta Apocalipsis, sacudirá tu pensamiento tradicional para conformarlo a la Palabra de Dios. Con esa base bíblica, te invita a imaginar cómo será esa nueva tierra y la vida que habrá en ella. El último capítulo propone algunas implicaciones de esta teología para tu vida… en tu realidad actual, ¡aquí y ahora!