DISPENSACIONES I

Para una mejor comprensión del panorama general del relato bíblico lo vamos a dividir en edades o etapas principales en el designio de los tiempos. A esto llamaremos E R A. Una era en las escrituras es un período de tiempo que separa, a través de un cambio violento en la tierra, una generación de otra entre los habitantes de la tierra. (Mt 13:39-49, 2 Cor 4:4, Gal 1:4). Por lo tanto existen cuatro eras bien definidas que son:

•             1º La era pre-edénica. Entre Génesis Cap 1 verso 1 y 2.
•               2º La era antediluviana. Antes del diluvio universal.
•               3º La era presente. En la cual vivimos.
•               4º La era por venir o milenio. Después de la gran tribulación.

El estudiante debe distinguir que en la Biblia hay 4 diferentes palabras griegas usadas en el N.T. las cuales se traducen como “mundo”, pero que tienen diferentes matizaciones, veamos:

   KOSMOS– Significa “orden”, “disposición regular”, “ornamento”  “decoración” (1 Pd 3:3) “el ponerse vestidos -kosmos-” hace alusión al universo material (2 Pd 3:6).Puede expresar el presente orden de  cosas.(Jn 18:36)

   AIEN– Un período de tiempo de carácter significativo; una era, un estado de cosas marcando una edad ó era.(Mat 13:39).

   GE—- La tierra, el terreno, la superficie de la tierra, la tierra opuesto al mar (Apo 13:3).

   OIKOUMENE– La tierra habitable, mundo. (Mt 24:14; Heb 1:17) Como una ilustración de la terminación de una ERA, y el comienzo de una nueva se producen cambios en las superficie de la tierra, veamos el ejemplo del diluvio (Gén 7:11, 7:23, 8:15-17). Todas las eras terminan en acontecimientos catastróficos, como consecuencia del pecado, así ocurrirá al terminar la era que actualmente vivimos, pues dará lugar  a la gran tribulación. El Dr Frank Gaebelein en su libro sobre las dispensaciones establece SIETE PRINCIPIOS para el estudio de la Biblia, los cuales resumiremos como:

1. DIOS, EL GRAN SOBERANO CREADOR.

Las escrituras no hacen un especial esfuerzo por probar la existencia de Dios, lo cual se dá por sentado. El fué quien trajo este magnífico sistema de mundos, y  todo lo que éste contiene. Él lo mantiene en perfecto orden, relación y armonía, y gobierna sobre todas las inteligencias creadas, angelicales o humanas, que los habitan.

Es el gobernador activo, no el ausente poseedor que crea el universo, y luego lo deja a su propio destino. Dios es omnipotente, omnisciente, omnipresente. El está preocupado en los intereses aún de las más pequeñas de sus criaturas. El observa la caída del gorrión, y ha enumerado aún los cabellos de nuestra cabeza.

2. UN PODER MALIGNO EN PERSONA.

Los hombres siempre se han preguntado que si Dios existe ¿Cómo puede permitir que hayan en el mundo tanta miseria, hambre y guerras fratricidas?. Dios no es responsable de esta situación, ó de ninguna otra condición prevaleciente en la tierra, pues como dice la palabra: “No os engañéis; Dios no puede ser burlado. Todo lo que el hombre siembre, eso mismo cosechará.” (Gálatas 6:7). Existe una persona que origina estos males, Satanás. El fue un ángel de Dios, y se rebeló, convirtiéndose en el peor enemigo de Dios, el hombre y su creación. La Biblia dice que él es asesino, y engañador desde el principio, por lo cual resiste y se opone a todo propósito Divino.

3. R E D E N C I Ó N .

Dios es un ser de absoluta Santidad en Su naturaleza. Su Santidad tiene que reaccionar haciendo desaparecer de Su presencia aquél que no está en armonía con Él, pues es un ser perfecto. Cuando el hombre  cayó, como consecuencia de su pecado, él fue echado del huerto del Edén, y del lugar de comunión con el Santo Dios. Esta lección es presentada en la realidad objetiva que se muestra a través de todo el Antiguo Testamento, en la economía sacrificial del Tabernáculo, y en el Templo. El hombre fue excluído de la presencia divina, del Lugar Santísimo, y sólo podía venir representativamente una vez al año y con sangre procedente de un sacrificio.

 El Amor de Dios fluyó para el ser que Él había creado a su propia imagen y semejanza, y aún antes de la caída. En anticipación a esta calamidad, preparó un “CORDERO INMOLADO DESDE ANTES DE LA FUNDACIÓN DEL MUNDO”, quien daría Su Vida, sin mácula, para la Redención del hombre.

4. R E T R I B U C I Ó N.

 Dios no es sólo un Dios de Amor, sino también de la más absoluta e inflexible y perfecta simetría de carácter. Su justicia requiere que la violación de Su Santa Ley reciba la más completa satisfacción, y que el transgresor deba ser castigado pues “La paga del pecado es muerte”. A pesar del hecho, (el pecado) Él ha preparado un camino para retornar a la comunión con todos los hombres, para ello ha hecho una provisión en su Amor, esto se representa en el sacrificio sustitutivo de Jesucristo. El hombre, es un libre agente moral, y puede levantar su voluntad, aún en desafío al mismo Dios que lo creó. El rechazo del amor de Dios al no aceptar su retribución en Jesús hace que el pecado sea eterno, y deba ser castigado, con sus tremendas consecuencias: exclusión de la presencia de un Dios Santo. “El alma que pecaré morirá”.

5. UN   PUEBLO  ESCOGIDO.

En Su Divina Soberanía y Sabiduría, Dios ha escogido un pueblo. La nación Israelí es como un medio para dar su revelación y su pacto, tratando así con el mundo a través de este canal; ellos son como un testigo de su existencia, Él como el verdadero Dios viviente, y su pueblo un canal para la manifestación de Su Gracia sin igual a una nación indigna, haciéndose extensiva a todas las naciones.

6. EL  PRINCIPIO DE  ESTRUCTURA

   El plan estructural de la escritura es claramente visto en los siete períodos dispensacionales de la Palabra. La definición de “dispensación” dada por el doctor Scofield, difícilmente puede ser mejorada  -”una dispensación es un período de tiempo durante el cual el hombre es probado en cuanto a su obediencia a alguna revelación específica de la voluntad de Dios”. Dios ha dotado a sus criaturas con una libre voluntad, por lo tanto, esa voluntad debe ser probada para ver si está del lado de Dios, ó para desobedecerle. En Apoc. 21:27 vemos que el propósito final de Dios es tener un universo, ó Reino, sobre el cual Él presida, y del cual serán excluidos para siempre toda cosa que no esté en armonía con Él.

Podemos notar fácilmente que para que esto sea realizado, la propia voluntad de sus criaturas debe ser probada, y confirmada, en obediencia, de otra  manera habría continuamente la posibilidad de que el plan de Dios sea trastornado por la desobediencia. Dios no nos hizo como un juguete mecánico, para que se nos de cuerda y nos pongamos en movimiento, sino que nos hizo con capacidad y poder para que le amemos, le glorifiquemos, y tengamos comunión con El. Dios nos hizo para revelarse a nosotros, y por medio de nosotros (Isa.66:1,2;57:15).

Después de la caída de Satanás, el hombre, la nueva criatura salida de la mano de Dios, debe, por necesidad, ser probado. El registro de la evidencia, o caída del hombre, en el jardín del Edén, es lógico y razonable. Las dispensaciones, entonces, nos enseñan los varios métodos por los cuales Dios ha probado, y probará, al hombre.

Estas dispensaciones son: “INOCENCIA”, “CONCIENCIA”, “GOBIERNO HUMANO” ò primera organización, “PATRIARCAL” ó promesa, “LEY”, “GRACIA” y “MILENIO” O GOBIERNO DIVINO. Esto no significa que las escrituras pueden ser separadas en diferentes compartimentos, aislando por completo una parte de la otra. Estas dispensaciones a menudo, corren una, dentro de la siguiente, y algunas, que al parecer ya han pasado, continúan vigentes en lo que concierne al trato de Dios para con el hombre; Por ejemplo, la dispensación del gobierno humano. Hay una enseñanza ultradispensacional, que quita de nosotros, los cristianos, no solamente el Antiguo Testamento, pero sí largas porciones del Nuevo, y que clasifica y explica la Escritura de una manera tan rigurosa, que no somos capaces de reclamar las bendiciones de ninguna porción que no sea la estrictamente dirigida a nosotros por los tales maestros. Esto es erróneo (Ro.15:4 y 2º Timoteo 3:16).

Las Escrituras también revelan ocho pactos hechos por Dios:

 1-EL EDENICO (Gén.1:28)             2-EL ADAMICO (Gén.3:14,15)

 3-EL NOECINO (Gén.9:l, y 11:10)  4-EL ABRAHAMICO (Gén.12:1)

 5-EL MOSAICO (Ex.20)                  6-EL PALESTINO (Lev. 26; Dt.28:1; 3O:3)

 7-EL DAVIDICO (2ª Sam.7:16; 1ª Cr. 17:7; Sal. 89:27)

 8-EL NUEVO PACTO (Jer.31:31-4O y Heb.8:8)

El pacto Edénico condicionó la vida del hombre en su estado de inocencia, mientras que después de la caída surge el Adámico, otorgándole al hombre la promesa de un Salvador. El Noecino establece el principio del Gobierno común, y asegura la continuación de vida en la tierra. El Abrahamico, funda la nación de Israel, entregando la tierra de Palestina a los descendientes de éste, mientras que el pacto Mosaico, por medio de la Ley, condena a todos los hombres, pues dice la Palabra de Dios que “todos pecaron y no alcanzan la gloria de Dios,” (Romanos 3:23). El Palestino asegura la restauración final, y conversión de Israel. El Pacto Davídico promete el Trono de Israel a la posteridad de David, hecho que se consuma en Cristo-Jesús. El nuevo Pacto, asegura la transformación Espiritual de todos los que creen en Cristo-Jesús, formándose la Iglesia y la bendición a los gentiles.

7. EL PRINCIPIO DE CONSUMACIÓN.

Dios ha hecho planes, y se está moviendo hacia una meta definida en el desarrollo de su redención. El ha ordenado un glorioso destino para su pueblo redimido, tanto en lo terrenal como en lo celestial. Este propósito está para ser consumado en el Segundo advenimiento del Redentor, quien regirá al mundo con justicia, y cuando Él haya administrado el Reino del Milenio, lo entregará al Padre. Entonces será establecido un nuevo cielo y una nueva tierra, donde morará la justicia para siempre, y entonces Dios será Supremo y será obedecido por todo el universo. 

LA ERA CREATIVA

Hay un decidida diferencia de opinión entre los estudiantes de la Biblia en cuanto al método de la creación. Algunos creen que Gén. 1:1, es sólo una declaración preliminar de la narración de la creación y que, lo que sigue, registra la manera ó el procedimiento por el cual lo que fue originalmente un mundo deforme, (v.2) vino a ser un precioso cosmos, perfeccionado en 7 largos períodos designados como “días”. Otros creen que Gén. 1:1, se refiere a la creación original del sistema solar en el desconocido pasado, perfecto y completo; y que Gén. 1:2, se refiere a alguna calamidad que convirtió al mundo en una ruina; y entonces el relato detallado que sigue es un período de reconstrucción de 6 días durante los cuales la tierra fue restaurada a su orden y armonía. Se afirma desde esta perspectiva que entre los versos 1 y 2 fue la caída de Satanás cuando era ángel de luz.

El siguiente bosquejo está de acuerdo con esta última vista:

1.-Creación original (Gén 1:1). La escritura se refiere a la creación de los cielos y la tierra (el sistema solar) en alguna ocasión en el pasado indefinido. Dios pudo haber formado el universo, bien sea poniendo en movimiento fuerzas a las cuales gradualmente trajeron la consumación de un cosmos ordenado, ó lo pudo haberlo hecho simplemente por un mandamiento en Su gran poder. Nosotros creemos que éstos últimos es la verdad. No hay conflictos entre la Biblia y la Ciencia. Hasta cuando continuó la creación en esta forma es algo desconocido. En Gén. 1:2. “La tierra sin forma y vacía”. (La tierra fue convertida en un desperdicio y desolación”–hebreo), se refiere a alguna calamidad que convirtió al mundo entero en una ruina. La causa probable es hallada en Isa.14:12-14; Ezeq.28:12-17 y 1ªTim.3:6. Satán puede haber sido gobernante de la tierra original y Dios para castigarlo, convirtió la tierra en un lugar inhabitable. Esto puede explicar la enemistad de Satán con la raza humana, a quién fue dado el dominio sobre la tierra y sus criaturas por medio de Adán.

2.-La tierra caótica (Gén. 1:2.) La tierra original no fue creada una desolación (Isa.45:18). Fue tornada a una condición de caos y oscuridad siendo sumergida con agua. La tierra presente como la conocemos ahora, es preservada para una renovación final por fuego (2ª Ped.3:5-7). En el período que los geólogos llaman el período glacial, son hallados los restos de animales prehistóricos, pero ningún resto del hombre ha sido jamás hallado. Esto es evidencia de que el hombre en su condición presente nunca habitó la tierra original.

3.-Los cielos y la tierra que ahora son (2ªPed.3:7). El registro en Gén.1:3-31 no se refiere al trabajo original de la creación, pero sí a un período (¿porqué no son 7 días literales?…”y la tarde y la mañana fueron el primer día”–también Ex. 20:9-11) de regeneración o reconstrucción administrada por el Espíritu de Dios (Gén.1:2, la ultima parte) para sacar la tierra de su estado caótico.

a) El primer día (Gén.1:3-5): El uso de 2 palabras, “creado” y “hecho” parece indicar que este trabajo fue principalmente reconstructivo. La palabra “creado” después del verso primero no es mencionada otra vez hasta el v.21, cuando una nuevo orden de animales acuáticos es traída a la existencia. El trabajo del primer día no concierne al sol, la luna y las estrellas, pues éstas aparecieron el cuarto día, pero más bien se  refiere a la manifestación de la luz como dividida de las tinieblas. Los científicos acostumbraban a mofarse del registro de Génesis, porque éste habla de la luz existiendo antes de la creación del sol, siendo que el sol era considerado la fuente de toda la luz. Ha sido probado, sin embargo, que la luz cósmica puede existir y existe en la tierra fuera del sol.

• b)Segundo día (Gén.1:6-8). El trabajo de este día incluye la posición del firmamento llamado cielo, ó atmósfera, sobre nosotros, cuyas nubes retienen la humedad (“agua sobre la tierra”) separándolos de las aguas de la tierra.
• c)Tercer día (Gén.1:9-13). En el tercer día, la superficie de la tierra fue formada en grandes montañas y en grandes valles, en los cuales fueron reunidas todas las aguas llamadas “mares”. Entre éstas, la tierra apareció seca. El v.11 encierra lo que vemos en la primavera, la resurrección de la vida de las plantas, de las semillas que han permanecido durmiendo en la tierra durante el invierno. El hecho de que la tierra fuese sumergida en agua, no destruyó estas semillas. Evidencia de restos fósiles de la vida vegetal en el extracto de la tierra, prueban la existencia de plantas en la tierra antes de la calamidad sucedida. Dios simplemente llama a estas semillas a renacer nuevamente.

d)Cuarto día (Gén.1:14-19). Apareció en este día el brillo del sol, la luna y las estrellas, para alumbrar en la noche. Aparece así el concepto de día y noche. Los años y cambios de estaciones resultaron de esta acción y el tiempo empezó a razonarse.”Luces” en el hebreo (v.14), es lumbrera, demostrando que ellos no eran necesariamente el manantial de luz en sí mismos.

e)Quinto día (Gén.1:20-23). Dios “creó” las aves de los aires y los peces del mar en el quinto día. Esto demuestra que toda la vida animal fue destruida en la calamidad que había venido sobre la tierra. Restos de fósiles y huesos de pájaros y animales de especies no pertenecientes a las que en el presente conocemos, son hallados en la tierra hoy día.

g)Sexto día (Gén.1:25-31). El trabajo fue doble del sexto día, pues fueron hechos “los animales de la tierra” y después el hombre. Estos animales terrestres fueron probablemente los mismos que tenemos hoy día. El hecho de que fueran creados según su especie, cuya expresión es repetida 6 veces, demuestra que no fueron sacados de una sola especie. Que el hombre también fue “creado”, demuestra que no somos descendientes de un mono. El hombre fue creado a la imagen y semejanza de Dios, no a la imagen de un mono, y no fue formado de dicho animal, sino del polvo de la tierra. El hecho es que hay una distancia considerable entre el orden más inferior del hombre y el tipo de bestia más perfeccionada, por lo cual la ciencia ha fracasado en demostrar el hecho de la evolución. “El eslabón perdido” nunca ha sido hallado. Todas las diferentes clases de animales fueran creadas separadamente, y esto se prueba por el hecho de que cuando diferentes especies de animales son cruzados, su linaje es estéril. Que toda la raza humana es de una especie y de un origen común (Hechos 17:26) es claramente visto en el hecho de que cuando diferentes razas de la tierra se intercambian en matrimonio, su linaje no es estéril, sino fértil. Esto hace nulo el argumento que sólo la raza blanca es la raza Adámica.

Adán no fue creado como un bebé un salvaje y primitivo, sino como un hombre completo, perfecto en inteligencia y conocimiento, de otra manera él no hubiese podido nombrar a las bestias del campo y las aves del cielo. El hecho de que sus descendientes tuviesen tal destreza en la invención de  los instrumentos musicales, e inventos mecánicos, y pudieran construir ciudades, torres y barcos tales como el arca, prueba que los hombres en los tiempos antediluvianos era un ser que poseía un intelecto gigantesco, y que en vez de desarrollarse, el hombre se ha degenerado, habiendo una evolución al reves, “Dios hizo al hombre perfecto, pero el se ha convertido en animal”.

g)Descanso de Dios en el séptimo día (Gén.2:1-6) Así que el 7 día Dios termino su obra y descanso, pero para el hombre este fue el primero día de su calendario sobre tierra. Ahora el hombre es dueño de esta tierra y de todo lo que en ella había, sobre la cual tendría que reinar.