Pero no es solo en las comunidades religiosas donde encontramos este tipo de enfoques pesimistas para el cuerpo físico. Un tema que sigue resurgiendo en la cultura secular más amplia de Occidente es una angustia subyacente con respecto al cuerpo. De hecho, si las tendencias actuales en el transhumanismo, el tecnohumanismo y el posgenerismo continúan, los cristianos que entienden sobre la bondad de la creación pronto pueden representar el último esfuerzo para afirmar la bondad del cuerpo.
En su libro La Venganza de Eva: Las Mujeres y la Espiritualidad del Cuerpo, Lilian Calles Barger comparte algunas de las formas en que las mujeres modernas están profundamente preocupadas por el hecho de su cuerpo físico. Ella muestra cómo la búsqueda de una espiritualidad incorpórea ha dejado a las mujeres extrañas en sus propios cuerpos. Influenciadas por el feminismo, las mujeres han sido sutilmente alentadas a ver su cuerpo como una barrera para la verdadera realización. El cuerpo de una mujer, una vez una fuente de orgullo, ahora se ve a menudo como una maldición, una barrera para la verdadera liberación cuando buscamos construir identidades independientes de las fijaciones de la creación material.
La reciente operación de cambio de sexo de Bruce Jenner, la película de Ethan Hawke, Predestination, basada en la historia de Robert A. Heinlein, el alter ego de realidad virtual de Ray Kurzweil, Ramona, celebridades que popularizan la moda andrógina, nuevas instalaciones de baños que deben construirse o rediseñarse porque algunos la gente no puede o no quiere decidir si entra por la puerta femenina o masculina, etc. ¿Por qué ocurre esto?
Es de suma importancia distinguir entre individuos, por un lado, y movimientos, por el otro. Debemos simpatizar con el individuo que está genuinamente confundido con el género y, por lo tanto, frustrado, confundido, intimidado y le resulta difícil encontrar su lugar en el mundo. Sin embargo, dentro de esta serie hay otra consideración que es el movimiento posgénero.
El movimiento consiste en individuos que trabajan a través de canales de influencia dentro de la cultura, la política, la tecnología, etc. para no solo hacer un lugar para el individuo antes mencionado, sino que buscan cambiar radicalmente la cultura por varias razones; una cultura hecha (o más bien, rehecha) en su imagen postgénero.
Estos y muchos otros ejemplos similares denotan un cambio drástico dentro de la política global. Prácticamente cualquier religión oculta/mágica o de una sociedad secreta mantiene que Dios y/o el humano perfecto es andrógino o hermafrodita. Tal conocimiento oculto antiguo literalmente se está convirtiendo en una corriente principal, con noticias recientes, como por ejemplo, un niño de ocho años que decide elegir su propia expresión de género y los padres lo apoyan (en realidad, el caso más probable es que los padres manipularon al niño de ocho años, ya que a esa edad no se llega a tales conclusiones, ni se está reflexionando sobre tales problemas).
Las religiones esotéricas o sociedades secretas ocultas de magia generalmente también sostienen que el Dios creador, YHVH, el Dios de la Biblia, es un Dios opresivo que quería mantener a la humanidad sometida e ignorante. Por el contrario, afirman que Satanás (la serpiente) es el salvador de la humanidad que nos trajo la iluminación al alentar a Eva a comer del Árbol del Conocimiento. Por supuesto, el Árbol es el del Conocimiento del Bien y del Mal. Ahora, dado que se hace referencia al bien en numerosas ocasiones dentro del Génesis antes del consumo de la fruta prohibida, ¿Qué se podría haber añadido al comer de él, sino solo el mal?
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