Apocalipsis 3:8 dice ‘Yo conozco tus obras. Por eso, he puesto delante de ti una puerta abierta, la cual nadie puede cerrar, pues aunque tienes poca fuerza, has guardado mi palabra y no has negado mi nombre.
Cuando la biblia habla de guardar la palabra de Dios y de no negar su nombre, habla específicamente de tu fidelidad. Una persona fiel es aquella que, en medio de cualquier lugar, dice: Yo le sirvo a Dios; y, en cualquier circunstancia, sigue diciendo: Hasta aquí me ha ayudado Dios, aquí me guarda Jehová. Y las puertas que Dios abre se mantienen abiertas para ti, cuando guardas su palabra y no niegas su nombre.
En la iglesia, todo el mundo es amable, todo el mundo es cristiano, todo el mundo alaba y adora a Dios. Pero, cuando la biblia habla de guardar su palabra, va más allá que esto. Es estudiar, escudriñar, aprender y aplicar la palabra de Dios. Es al no negar su nombre que tú afirmas y guardas la palabra, y donde único puedes hacer esto es afuera de la iglesia. Aquellos para quienes las puertas están abiertas son aquellos capaces de impregnar la presencia de Dios dondequiera que van. En la escuela, en la universidad, en el trabajo, en la farmacia, en el supermercado, dondequiera son la misma persona y lo que hacen es llevar la gloria de Dios dondequiera que van.
Procura que, dondequiera que vayas, la gente reconozca que hay algo especial en ti y deseen estar en el lugar porque el ambiente se torna diferente y eres de bendición. Si quieres tener la puerta abierta de bendición y de oportunidades en tu vida, refleja la gloria de Dios, no tan solo en la iglesia, sino dondequiera que vayas.
Hay personas que, al compartir con no cristianos, se les pegan las malas costumbres, en lugar de hacer la diferencia. Pero tú no niegues su nombre, porque hay una puerta abierta para los que son fieles. Manifiesta la presencia de Dios en tu vida. Contagia al mundo de la palabra y del gozo de Dios. Que deseen estar donde tú estás, y quieran de la bendición que hay en ti, que es Cristo.
Lo grande es que, aunque hayas fallado, aun así, este mensaje es para ti. La biblia dice que Pedro negó a Jesús y, con sus actitudes, no mostro lo que había recibido por tantos años; pero esto no detuvo que la gloria de Dios se manifestara en su vida. Pedro lloró amargamente y se arrepintió; y dice la palabra del Señor que, tan solo con la sombra de Pedro, los enfermos sanaban. Su error, no detuvo a Pedro de seguir manifestando la gloria de Dios y predicarle a multitudes.
Si eres un hijo de Dios que ha tropezado y caído, lo único que puedes hacer es levantarte firme y seguir hacia adelante. Dios te da una nueva oportunidad. Vive con la palabra guardada en tu espíritu. Cambia la manera de pensar y de conducirte. Mantente fiel a su palabra, no niegues su nombre. Manifiesta la gloria de Dios. Una puerta grande y eficaz se abre a tu favor. Es la puerta de oportunidades, puerta que Dios abre y que nadie podrá cerrar.
0 comentarios:
Publicar un comentario